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“Justicia para el ahogado” por Alejandro Rodríguez

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Yuniel era un muchacho joven que nació en la dictadura, que perdió su juventud gritando consignas, que no entendía, obligado desde niño, era un chico de inteligencia natural, que soñaba con ser ‘Yuma’ pá resolver el problema de su hambre, de ser libre, el nunca vio otra salida por falta de educación.

Yuniel a muy temprana edad se dio a la tarea de construir un barco para cruzar el estrecho de la Florida, poco a poco consiguió con sus dotes de ingeniero naval robarse dos gomas de un tractor y cuatro tablas de dos cajas de manzanas que comían extranjeros en sus visitas de sexo.

Yuniel soñaba con resolver los problemas de sus padres a su llegada a la potencia enemiga que ‘El Dictador’ culpaba por su necesidad de todo, a él nunca le intereso la política por que culpaba a los viejos de problemas que él no sabía componer.

Yuniel nunca se educó en la historia de su país, donde mucho tiempo antes que los otros jóvenes entregaron su vida por el deber de la patria.

Llegó un día donde cambió sus estudios de construir barcos con tablas por uno de marinero con viaje de regreso después de un año y un día. Y partió al consultar a los santos y con la bendición de su padre que sentía el orgullo de un hijo con el valor que él no poseía y escondía en el alcohol.

Yuniel nunca entendió como el destino le jugaría la mala pasada de no conocer su sueño por una tormenta que le reclamó la vida por la osadía de retar el mar de muchos muertos.

¡Yuniel murió en el intento!

Hoy Yuniel pide justicia desde el fondo del susodicho mar y culpa la dictadura por provocar su partida, yo siento tristeza por los que quedaron varados en el mar de muchos muertos en el intento de búsqueda de la libertad deseada, yo pido justicia para el ahogado.

Alejandro Rodriguez

Abril, 30, 2014

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