Tiroteos ocurridos hoy en dos instalaciones militares en Chattanooga, Tennessee, provocaron la muerte de cuatro elementos militares estadounidenses y dejaron otros tres heridos.
El agresor armado también fue muerto más tarde, indicaron las autoridades.
De acuerdo con la policía local, los dos tiroteos duraron cerca de 30 minutos y ocurrieron alrededor de las 11:00 hora local en el Centro de Reserva Naval y en el centro de reclutamiento militar a 10 kilómetros de distancia.
Según informes, el agresor armado disparó mientras conducía un Mustang descubierto.
La Oficina Federal de Investigación de Estados Unidos (FBI, por sus siglas en inglés) inició la investigación de lo que los funcionarios locales describieron como “un acto de terrorismo interno”.
“Trataremos esto como una investigación de terrorismo hasta que determinemos que no lo es”, dijo en una conferencia de prensa Ed Reinhold, un agente especial del FBI a cargo de la investigación. “No hemos determinado si se trató de un acto de terrorismo o de un acto delictivo”.
Importantes funcionarios del FBI citados por The Washington Post dijeron que al parecer, el tiroteo no estuvo relacionado con ningún grupo terrorista.
Por otra parte, Reinhold dijo que al parecer, el hombre armado “con varias armas” actuó solo y añadió que el agresor no trabajaba en las instalaciones militares involucradas.
Funcionarios del orden de Estados Unidos, citados por la cadena de televisión CBS News, dijeron que el presunto agresor era Muhammad Youssef Abdulazeez. Hoy con anterioridad, la policía local indicó que se cree que el sospechoso vivía en la zona y que actuó solo.
Los tiroteos se producen un mes después de que un hombre armado de raza blanca abatió por motivos raciales a nueve feligreses afroamericanos en Charleston, Carolina del Sur. Las autoridades investigaron inicialmente la masacre en la iglesia de Charleston como un “crimen de odio” y no como un posible acto de terrorismo.
