El centro comercial Plaza Carlos III, en La Habana, uno de los mayores establecimientos en divisas del país, fue cerrado sobre las 4:00 de la tarde de este lunes entre rumores sobre una “amenaza de bomba”, informa el periodista Vicente Morín Aguado, colaborador de DIARIO DE CUBA, quien se encontraba en el lugar.
Morín Aguado dijo haber presenciado la llegada al centro comercial de una brigada del Ministerio del Interior (MININT) con perros entrenados.
Añadió que trabajadores de la tienda comunicaron la versión de la supuesta “amenaza de bomba”.
Pese a ello, las autoridades “no acordonaron la zona”, dijo el periodista independiente. Opinó que podría tratarse se un intento de “no crear pánico”.
“Numerosos cubanos permanecían una hora después alrededor del mercado a la expectativa de qué había realmente sucedido y de si iban a reabrir o no”, dijo Morín Aguado.
Otra colaboradora de DIARIO DE CUBA, Alicia Fernández, estuvo más tarde en el lugar e indicó que el centro comercial continuaba cerrado, pero no había despliegue policial y en las calles aledañas el tránsito era el habitual. Señaló que algunos transeúntes se acercaban a la reja de entrada al establecimiento sin encontrar impedimentos.
Fernández afirmó ver salir a empleados de la tienda en pequeños grupos. “Hay una situación ahí”, se limitó a decir uno de los trabajadores sin querer más detalles.
Según la periodista, una revendedora que suele realizar sus actividades fuera del Plaza Carlos III, confirmó que circuló el rumor de una supuesta “amenaza de bomba”.
“Se armó el corre-corre y sacaron a todo el mundo”, dijo la mujer. Añadió que, al parecer, los empleados de la tienda estaban siendo interrogados dentro del establecimiento.
Fernández consideró que, dado el ambiente en el lugar, la supuesta colocación de algún artefacto explosivo habría sido descartada.
El centro comercial Plaza Carlos III tiene cuatro plantas con diversas tiendas que venden desde electrodomésticos, ferretería y accesorios de autos, hasta artículos de hogar, ropa y alimentos, todo en pesos convertibles (CUC).
En la Isla no ocurren incidentes con artefactos explosivos desde 1997, cuando entre abril y septiembre fueron colocados varios en hoteles de Varadero y La Habana. Una de esas explosiones causó la muerte al turista italiano Fabio Diccelmo.
Publicado en Diario de Cuba
