La revista estadounidense Vanity Fair dedica su portada de noviembre a Rihanna e incluye las imágenes tomadas a la cantante barbadense en La Habana por la famosa fotógrafa Annie Leibovitz.
La directora de Moda y Estilo de Vanity Fair, Jessica Diehl, explica en el número que la decisión de viajar a Cuba se tomó pocas semanas después de que el gobierno de Barack Obama aliviara restricciones de viaje a la Isla.
“Todo ocurrió al mismo tiempo. En el momento en que se decidió que Rihanna sería nuestra portada, las restricciones de viaje fueron levantadas, así que nos fuimos inmediatamente. Era una especie de obviedad”, dice Diehl.
La edición incluye una entrevista en la que Rihanna habla de las diferencias entre su reputación y su vida real.
La popular cantante de 27 años estuvo en La Habana entre finales de mayo y principios de junio pasados en una visita que causó tanto revuelo como polémica por la agresividad de algunos miembros cubanos de su personal de seguridad.
Las fotos de Leibovitz la muestran en el bar La Rosa, junto a un auto Lincoln Continental Mark II que, según la revista, perteneció a la primera dama Marta Fernández de Batista; también, en el interior de una casa del Vedado; desnuda en una cama; en la calle, rodeada de admiradores cubanos, y en la escalera del restaurante La Guarida, en Centro Habana, junto a la cola de un Chevrolet Impala de 1959 y una frase de Fidel Castro.
“Es una combinación”, afirma Diehl. “Tienes a Rihanna, entonces tienes a Cuba y entonces tienes a [la fotógrafa] Annie [Leibovitz] que ama a Cuba y ha fotografiado un montón de cosas allí”.
“Se trata de tomar en cuenta el color, el estado de ánimo y la especie de patina de los lugares y casas y lugares de música, y cosas así”, señala.
