El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, pidió perdón por el bombardeo del ejército norteamericano el pasado sábado a un hospital en la ciudad afgana de Kúnduz, donde murieron 22 personas y decenas resultaron heridas, informó Prensa Latina.
Josh Eirnest, portavoz de la Casa Blanca, refirió que para ofrecer disculpas, Obama se comunicó vía telefónica con la presidenta de la organización administradora del hospital, Médicos Sin Fronteras, Joanne Liu, a quien prometió iniciar una investigación transparente, objetiva y rigurosa sobre los hechos y las circunstancias del incidente.
El jefe de Estado norteamericano también llamó por teléfono al presidente afgano, Ashraf Ghani, para expresar sus condolencias por el personal sanitario y los pacientes que perdieron la vida en el ataque aéreo.
Aunque el Pentágono alega que se trató de un ataque por error en el contexto de la ofensiva militar contra el movimiento talibán, Médicos sin Fronteras exigió una investigación internacional.
