El portal oficial Cubadebate analiza el fenómeno del paquete en un artículo que aborda “las ventajas” de lo que califica como “medio alternativo privado” frente a las opciones que ofrece el Estado.
El artículo menciona como “una de las grandes ventajas” del paquete el hecho de que es “relativamente fácil de adquirir”.
“Si tienes los medios tecnológicos y económicos, basta con pedírselo a algún compañero de trabajo o de escuela, vecino, amigo o utilizar una de las vías anteriormente mencionadas para obtenerlo”, asegura el autor del artículo.
Precisamente, añade, “estas facilidades constituyen el punto débil de las alternativas institucionales como Mi Mochila, una especie de paquete estatal que se distribuye a través de los Joven Club de Computación y por tanto funciona en un horario determinado y en un lugar determinado, haciendo muy incómoda su obtención”.
Al mismo tiempo, agrega, “la frecuencia de salida y la cantidad de materiales es considerablemente inferior” en el caso de los paquetes estatales.
El artículo menciona un estudio del Centro de Investigaciones Sociales (CIS) perteneciente al Instituto Cubano de Radio y Televisión, según el cual el 70% de los consumidores del paquete en La Habana lo obtiene sin costo alguno.
El estudio también apunta que el paquete solo se consume en el 39% de los hogares de La Habana. De acuerdo con el autor del artículo, “la cifra es bastante conservadora porque muchas personas consumen los materiales sin tener conciencia de ello”.
Por su parte, un especialista del Instituto Cubano de Investigación Cultural, Juan Marinello y profesor de la Facultad de Psicología de la Universidad de La Habana, Pedro Emilio Moras declara apunta que “se debe concretar en qué nivel de alcance está el fenómeno del paquete semanal”.
Según su opinión es “un fenómeno curioso, pero no masivo, porque está focalizado en las personas que tienen dinero para pagar el producto y una computadora y disco duro para obtenerlo”.
El paquete, según la descripción de Cubadebate, “funciona con tanta efectividad y dinamismo todas las semanas del año debido a un sistema de trabajo bien organizado en pequeños equipos (entre cinco y 12 personas), que se dividen las funciones y se especializan en la búsqueda de diferentes tipos de materiales”.
Con información tomada de Diario De Cuba
