Historia de un colegio de “antes de 1959” (vídeo)

El 12 de mayo de 1940 abrió sus puertas en Santa Clara el Colegio Adventista del Séptimo Día Las Antillas. Dentro de la institución se construyó una iglesia que se recuerda aún, después de 74 años de su fundación: La Iglesia Las Antillas.

El Registro de Asociaciones del Estado cubano reconoce oficialmente dos congregaciones Adventistas del Séptimo Día en Santa Clara, una de ellas es Las Antillas.

En febrero de 1967 dejó de funcionar el colegio. “Fue intervenido por el régimen Comunista”, expresa Clara María del Castillo Pineda, exestudiante de la institución, de 86 años.

“Al frente estuvo un oficial de apellido Balart. Él dijo que todas las instalaciones que quedaran vacías pasarían a formar parte de la Universidad Central Marta Abreu de Las Villas (UCLV)”, agrega.

Escuelas adventistas para todos

El colegio en principio fue inaugurado en Bartle, localidad de la antigua provincia de Oriente, en la década del 20 del pasado siglo. El traslado de la institución desde Oriente a Las Villas se realizó buscando una ubicación más céntrica y con el propósito de mejorar las condiciones del colegio.

En 1941 los adventistas tenían escuelas en 387 países e islas de infinidad de idiomas diferentes, según la revista Alturas No. 17, editada en el antiguo colegio. Éstas abarcaban los niveles de primaria, secundaria y preuniversitario, normales de maestros y otras especialidades.

Al respecto cuenta Clara María: “Aceptaban alumnos de otras religiones, pero con la condición de que recibieran la materia de las asignaturas de la religión adventista y respetaran tal credo”.

“En el colegio se atendía la educación física, intelectual y moral de los alumnos, así como la formación de hábitos y habilidades que contribuyeran al éxito de sus actividades en la vida y en el servicio a sus semejantes”, comenta el exestudiante Gregorio Bernardo Calvo González, de 81 años.

Según las fuentes, en este colegio todo el trabajo era efectuado por los alumnos y maestros, tanto en oficios, agricultura, fábrica de conservas, ganado, etc. Algunos estudiantes incluso trabajaban durante sus vacaciones y abonaban un determinado por ciento de las ganancias a la institución.

Valor arquitectónico

El Colegio Adventista del Séptimo Día Las Antillas no solo ostenta un valor histórico. Este conjunto de edificaciones (o lo que queda de ellas) exhibe muestras características del Art Deco.

“En su diseño utilizaron columnas rectangulares para resaltar la verticalidad”, revela la arquitecta Maida Méndez, trabajadora del Instituto de Planificación Física de Santa Clara.

“Se nota además la presencia de frontón escalonado con elementos decorativos muy modestos y uso de cerámica, siempre manteniendo líneas rectas y simples”, acota.

Nostalgia

Clara María del Castillos afirma que el colegio en sus 27 años de vida activa marcó huellas imborrables en “la historia del adventismo en Cuba”.

“Siempre se tenía en alto el lema del Colegio: La mano, la mente y el corazón. Es triste que a 48 años de su extinción, sus vivencias únicamente son recordadas por quienes transitaron y se relacionaron en él. Suerte que jóvenes como tú se preocupan por rescatar esta historia”.

La mayoría de los registros y documentos de la secretaría de la antigua escuela se encuentran en el Seminario Teológico de Cuba, Santiago de Las Vegas, Ciudad Habana.

Actualmente varios de los locales que pertenecían al antiguo colegio sirven como vivienda a trabajadores de la UCLV. Otras secciones se encuentran habitadas por 33 familias que las han ocupado de forma clandestina.

El resto de lo que queda de la institución está abandonado y en espera a que sea devuelto a la Iglesia Las Antillas, que realizó su reclamación. “Tenemos la propiedad de esos locales”, asegura el actual pastor de la localidad.

“Las autoridades de Santa Clara nos aprobaron la solicitud, pero solo de palabra. Aún no nos han restituido nada”.