Después de la recuperación de un tramo estratégico de una carretera en Alepo, en Siria, los efectivos golpes de la aviación militar rusa y la ofensiva terrestre del ejército sirio, las bandas terroristas se siguen replegando hacia el este buscando protección, destacó Prensa Latina.
Las fuerzas armadas sirias retomaron la víspera el control de la carretera que una a las ciudades de Alepo y Salamieh, después de aniquilar a los miembros del grupo terrorista Estado Islámico (EI) que intentaron cortar la vía.
Según fuentes militares, los uniformados lograron expulsar a los extremistas armados de esta importante arteria que va desde Alepo, a través de las ciudades de Khanaser y Ithriya, y enlaza hacia el sur, con las ciudades de Hama y Homs.
La carretera será abierta para el uso de los ciudadanos civiles este jueves.
La ofensiva militar desplegada en Alepo obligó a los grupos armados a buscar refugio en la zona oriental de esta provincia, a 350 kilómetros al noreste de Damasco.
También como parte de esta ofensiva, unidades conjuntas del ejército sirio, los Grupos de Defensa Popular y la milicia libanesa Hizbolah se preparan para lanzar un ataque masivo y liberar la base aérea de Kweres, en la provincia de Alepo.
Esta instalación militar, ahora bajo asedio de bandas terroristas del grupo Estado Islámico, está rodeada desde hace más de dos años por grupos extremistas armados, que han intentado tomarla sin conseguir su propósito.
Las fuerzas militares sirias se están reorganizando a unos cinco kilómetros de la base aérea, y se preparan para tratar de expulsar a los grupos takfiristas de la región de Sheij Ahmad, antes de aproximarse a la instalación defendida por cientos de uniformados que resisten las embestidas terroristas.
En estos más de dos años y medio bajo perenne amenaza de las bandas extremistas armadas, los defensores de la base de Kweres reciben los suministros por vía aérea, dado el cerco a que están sometidos.
Voceros castrenses confirmaron que en la provincia de Hama, a 209 kilómetros al noreste de esta capital, la aviación militar atacó fortificaciones y refugios del autoproclamado Ejército de la Conquista (Jaish al-Fatah) en los poblados de Latmin y al-Lahaya, y en las inmediaciones de Mork y al-Bana.
Otros combates se escenificaron en la central provincia de Homs, a 162 kilómetros al este de aquí, donde los uniformados retomaron el control de las colinas al-Hazem y al-Zanna, mientras que la aviación hostigó a los takfiristas del EI en la localidad de Mahin y en la ciudad de Karyatein.
Fueron bombardeados objetivos terroristas en la periferia del yacimiento petrolero de al-Shaer, y campamentos rebeldes ubicados en las localidades de Yab al-Yarah y al-Hazem al-Ausat.
En Deir Ezzor, a 461 kilómetros al este de esta capital, los aviones de combate aniquilaron a un número indeterminado de terroristas del grupo EI en las zonas de al-Yafra, Huwaiya, al-Mreiyie y al-Talibiya, además de destruirle sus pertrechos de guerra.
Hacia el occidente, en la provincia de Latakia, a 348 kilómetros al noroeste de Damasco, el ejército desalojó a los extremistas armados del monte de al-Fark y de las zonas de Beit Abou Rishe, y Kherbet Yeb al-Zaarour.
Más al sur, en Daraa, a 103 kilómetros de aquí, las tropas gubernamentales infligieron considerables bajas al grupo terrorista Frente Al-Nusra en el distrito de Daraa al-Balad, que se considera un paso clave para la infiltración de mercenarios, y para el contrabando de armas y municiones, por su proximidad con la frontera con Jordania.
En la periferia de esta capital, las unidades del ejército reforzaron el control sobre edificios cercanos a la autopista de Harasta y en las inmediaciones de al-Aman, donde fue destruida una plataforma lanzacohetes, un depósito de municiones y varios vehículos artillados.
Se mantienen los combates en las zonas de Gouta oriental y Daraya, contra agrupaciones del Movimiento Islámico de los Libres del Levante (Ahrar al-Sham) y el Ejército del Islam (Jaish al-Islam).
