La ofensiva del ejército sirio contra grupos terroristas que operan en la periferia de Damasco continúa hoy, después de recuperar el control de varias zonas en la ciudad de Harasta y causar considerables bajas a las bandas armadas, destacó Prensa Latina.
Según fuentes militares, fueron destruidas varias fortificaciones del autoproclamado Ejército del Islam (Jaish al-Islam), entre ellas un túnel empleado para almacenar armas y municiones y desplazarse a diferentes puntos de la ciudad.
Unidades de ingeniería del ejército desmantelan cargas explosivas colocadas en varios edificios y calles, colocadas por los takfiristas antes de emprender su huída de las zonas liberadas, a escasos 11 kilómetros del centro de Damasco.
También se reportó el desmantelamiento de una fábrica de artefactos explosivos en la zona de Gouta oriental, además de poner fuera de combate un emplazamiento de morteros y varios vehículos artillados.
En la localidad de Beit Sawa, a 16 kilómetros de aquí, también se destruyó un taller para fabricar explosivos y obuses de mortero, varios vehículos artillados con ametralladoras pesadas y un puesto de mando de Jaish al-Islam.
Los uniformados siguen hostigando a bandas del Frente al-Nusra (brazo armado de al-Qaeda en Siria), Jaish al-Islam, y el Movimiento Islámico de los Libres del Levante (Ahrar al-Sham) en la zona este del aeropuerto de Marj al-Sultan.
Mientras tanto, en la provincia de Alepo, a 350 kilómetros al noreste de esta capital, la fuerza aérea conjunta sirio-rusa atacó posiciones de los grupos terroristas en los poblados de Akomeh, Rasm al-Abd, Kaskeis, y en las ciudades de Deir Hfer y Tal Ayoub.
Como resultado de estos bombardeos fueron aniquiladas varias posiciones de los extremistas armados, entre ellos varios vehículos artillados, y un número indeterminado de bajas humanas en las zonas de Semer y Talet al-Shawaya.
Al sur de esta provincia, el ejército enfrentó a grupos del Frente al-Nusra en Khan Touman, Kherbet Ma’rata, al-Ameriyeh, Karm Azeeza, provocando cuantiosas bajas en sus filas.
Voceros castrenses confirmaron también que se frustraron varios intentos de penetración de grupos armados en Talet Bazo, Talet al-Rakhm, una escuela en al-Hekma y Talet al-Sunawbariyat, donde quedaron fuera de combate decenas de yihadistas.
El grupo terrorista Estado Islámico (EI) sufrió severas pérdidas humanas y materiales, después que las tropas gubernamentales atacaran campamentos en Tal al-Sous, al norte de la ciudad de Deir Hafer, en el este de Alepo.
Otros focos rebeldes bajo el fuego del ejército se localizaron en al-Sheikh Lotfi, Bustan al-Qasr, Karm al-Jabal, Bustan al-Basha, al-Sheikh Khudr, Bani Zeid, al-Rashideen Arba’a y en Salahu-Din.
Hacia el occidente, en la costera provincia de Latakia, a 348 kilómetros al oeste de esta capital, las fuerzas armadas y las milicias populares se hicieron del control de la colina identificada como 1154, al sur de la aldea de Kbana, dejando en el campo de batalla a decenas de takfiristas muertos, la mayoría de nacionalidad afgana.
Como resultado de las recientes operaciones, fueron liberados los poblados de al-Moroj, Jabal Beit Ahmad, Jabal al-Qrima, Juret al-Mai, Beit Marouf, Beit Najib Bshara, Ketf al-Ghanma, y al-Rashwan.
En la provincia de Deir Ezzor, a 461 kilómetros al este de Damasco, se reportó la muerte de más de 40 extremistas del grupo EI, y la destrucción de almacenes de armas, municiones y explosivos.
Los enfrentamientos armados se centraron en las poblaciones de Aisha, al Ashara y al-Mayadeen, y en las inmediaciones del aeropuerto militar de esta oriental provincia fueron puestos fuera de combate varios mercenarios de origen checheno, que viajaban en un vehículo artillado.
Otros focos del EI fueron atacados en los barrios de al-Hwaiqa, al-Omal y zonas cercanas al puente de al-Siyasia, en la ciudad cabecera provincial, y la aviación militar bombardeó además campamentos rebeldes en Janina, al-Bolil, al-Hwaiqa y al-Jbila.
La ofensiva militar continúa además en las provincias de Sweida, Daraa, Homs y Hama.
