El presidente del Gobierno y candidato popular, Mariano Rajoy, se mostró optimista en torno a los resultados electorales del próximo 20-D y en consecuencia, del futuro de España.
Desde la capital mallorquina, Rajoy se pronunció sobre los resultados de la noche electoral asegurando: “No me quiero meter en los líos de nadie, pero creo que puede haber alguna sorpresa» el 20-D.
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Ya se encuentra listo para el debate en el que se enfrentará contra el líder socialista, Pedro Sánchez, el próximo lunes en la Academia de Televisión.
Según informa el Diario Abc, de España, Rajoy cree que no tendrá problemas, pero explicó que ni discute ni entrena con ningún «sparring». «Yo a estas alturas, con cuatro años de Gobierno…», explicó, indicando que ya conocía los temas con suficiente profundidad. Cree que por su parte, el debate será «sensato, equilibrado y con lo que hay que hacer», pero no quiso pronunciarse sobre el papel que jugará Pedro Sánchez, que salió debilitado del debate a cuatro del lunes pasado y podría querer recuperar terreno en el del próximo día 14.
El primer mandatario también afirmó que no ha cambiado su estrategia con respecto al líder socialista: no va a atarcarle especialmente; y considera que «se han interpretado» sus palabras en un sentido que él no quiso darle.
No quiso valorar la evolución de voto del resto de partidos, que según sus propias encuestas internas suben -en el caso de Podemos y PP- y bajan -PSOE y Ciudadanos-. «Sólo me interesa lo que haga el PP, y recuperar la confianza de la gente».
Por ello, aseguró que «me lo estoy pasando muy bien en la campaña; la gente es estupenda». Y eso que hoy en Palma de Mallorca, a la entrada del Mercado del Olivar, ha escuchado los primeros gritos de «fuera, fuera» de la campaña, acallados de inmediato por los de «presidente, presidente» de sus simpatizantes.
