(EFE).- Las detenciones de disidentes en Cuba y los reclamos de justicia a la ONU por parte de víctimas del cólera en Haití aportaron hoy a la conmemoración del Día de los Derechos Humanos en América Latina y el Caribe un toque realista y amargo.
Más de un centenar de disidentes fueron detenidos en toda Cuba para evitar manifestaciones en el Día de los Derechos Humanos, como la que las Damas de Blanco habían convocado para en un céntrico punto de La Habana, al que solo pudieron llegar cuatro mujeres y un hombre, los cuales fueron detenidos, según constató Efe en el lugar.
Los cinco manifestantes apenas pudieron gritar “Vivan los derechos humanos” y “Libertad para el pueblo deCuba” antes de ser metidos en vehículos policiales en medio de insultos.
En toda Cuba ha habido “entre 150 y 200” detenciones de disidentes, muchos de los cuales han sido “asediados” en sus viviendas desde hace varios días, informó a Efe el activista Elizardo Sánchez, líder de la opositora Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN).
El fiscal general de Cuba, Darío Delgado, aseguró en una entrevista publicada hoy que en la isla no hay presos políticos y sostuvo que los reclusos que dicen ser disidentes son “presos comunes” atraídos por “organizaciones contrarrevolucionarias”.
Amnistía Internacional había denunciado el riesgo de hostigamiento y arrestos para activistas cubanos en el Día de los Derechos Humanos, en medio de un oleada de detenciones arbitrarias en la isla, que sumaron casi 1.500 en el último mes.
En Haití, la conmemoración estuvo marcada por una protesta de personas afectadas por la epidemia de cólera que estalló después del terremoto de 2010 y causó miles de muertos, la cual, según informes científicos internacionales, se originó en un contingente de “cascos azules” nepalíes de la Misión de Naciones Unidas (Minustah), algo nunca admitido oficialmente por el organismo internacional.
Los manifestantes se concentraron ante una base de la Minustah en Puerto Príncipe, donde entregaron 2.000 cartas personales dirigidas al Consejo de Seguridad pidiendo que la ONU asuma su culpa, que se les indemnice y se haga justicia.
“¿Cómo puede la ONU tener la posición moral de promover los derechos humanos y la dignidad en Haití cuando viola los derechos de las víctimas del cólera?”, se preguntó Mario Joseph, abogado de las organizaciones de apoyo a las víctimas.
Precisamente, en su mensaje por el Día de los Derechos Humanos, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, pidió hoy una acción mundial “más concertada” para protegerlos y promoverlos.
“Ante las enormes atrocidades y abusos generalizados que se están cometiendo en todo el mundo, este día debería impulsar una acción mundial más concertada para promover los principios atemporales que colectivamente hemos prometido cumplir”, dijo Ban en su mensaje.
Ban pidió a los líderes mundiales reafirmar su compromiso con los derechos humanos, impedir violaciones a gran escala y responder a las que se cometan.
El portavoz de la ONU Farhan Haq evitó hoy hacer comentarios sobre la petición de los afectados por el cólera. “Necesitamos revisar si las cartas (de las víctimas) han sido recibidas oficialmente por Minustah”, afirmó.
El defensor del Pueblo de Bolivia, Rolando Villena, alertó hoy del debilitamiento de instituciones clave para el cumplimiento de los derechos humanos en el país, como el Tribunal Constitucional y el Órgano Electoral, destacó que la violencia hacia las mujeres siguió en alza, con 108 feminicidios este año, y denunció la violación “sistemática” de los derechos de los indígenas.
La Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH) denunció que el fenómeno de criminalización de la protesta social en América Latina “aumenta” y en Ecuador pretende “intimidar y estigmatizar” a quienes “protestan en contra de proyectos industriales o en defensa de sus territorios”.
En Colombia la conmemoración del Día de los Derechos Humanos se vinculó con el proceso de paz entre el Gobierno y las FARC.
“Hay muchos desafíos en este proceso de paz, pero uno de los más importantes es cómo el Estado colombiano va a comenzar a tratar a estos pueblos indígenas y de campesinos como socios en su propio desarrollo”, manifestó el representante en Colombia del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Todd Howland.
En Brasil la jornada internacional sirvió de marco para un homenaje a los 61 policías militarizados asesinados en Río de Janeiro en lo que va de año, de los cuales 21 estaban en acto de servicio.
El Gobierno chileno por su parte publicó por primera vez la cifra de autores de violaciones de los derechos humanos durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) que están en manos de la justicia: 1.373 en condición de procesados, acusados o condenados.
En Uruguay el Día de los Derechos Humanos trajo también el recuerdo de las violaciones cometidas por la última dictadura (1973-1985) y de “la búsqueda de la verdad y la justicia”.
Según el defensor del Pueblo uruguayo, Juan Faroppa, esa búsqueda no se va a detener, porque “no hay marcha atrás”. “No solo las familias y las víctimas, sino también la sociedad uruguaya, no lo aceptaría”, subrayó.
En coincidencia con este día mundial, la fiscal general de Guatemala, Thelma Aldana, fue distinguida con el galardón internacional “Jaime Brunet”, que concede la Universidad de Navarra (España).
En su fallo, el jurado destaca el papel de Aldana en la lucha contra la corrupción política y económica que ha debilitado a la sociedad guatemalteca, así como su trabajo en pro de los derechos de la mujer y la población indígena y su lucha contra la violencia machista.
Y en Honduras, el Gobierno instaló hoy el Consejo Nacional de Protección para los Defensores de Derechos Humanos, que será presidido por la Secretaría de Derechos Humanos, Justicia, Gobernación y Descentralización.
El consejo fue instalado por el ministro coordinador General de Gobierno, Jorge Ramón Hernández, con ocasión de la conmemoración del Día de los Derechos Humanos.