En este año transcurrido desde el anuncio de restablecimiento de relaciones entre Cuba y EEUU, ¿cuáles son los avances conseguidos? Quizás sea América Latina quien haga una llamada de atención para los líderes cubanos.
El avance principal en este año ha sido el nivel de fluidez que ahora existe en las relaciones entre EEUU y Cuba. Sin movimiento no hay cambio, y por décadas nuestra política hacia Cuba estuvo estancada en una narrativa de guerra fría. Quedó claro que la obsesión de algunos de nuestros congresistas en usar la confrontación y el aislamiento a través de la Ley Helms-Burton como estrategia para promover la democracia solo ha contribuido a su retraso y causado gran daño al pueblo cubano. Le decisión de los presidentes Obama y Castro de reanudar relaciones ha creado un ambiente mucho mas dinámico, por el cual podemos promover nuestros intereses de manera que se presenten las oportunidades, y ayudar a vigorizar a todo sector de la sociedad cubana que anhele un mejor futuro para el pueblo cubano.
Durante este último año, ¿qué ha primado de parte del Gobierno cubano: los cambios o el freno a los cambios?
De parte del Gobierno c
ubano ha primado una combinación de cambios pequeños y parálisis a la hora de alcanzar cambios más significativos. Hemos visto un reblandecimiento en su discurso hacia EEUU, el crecimiento de un sector privado, y un aumento de acceso a WiFi en la Isla. Pero la mayoría de los cambios que hoy se perciben en Cuba surgen de cómo el pueblo interpreta y se aprovecha de las limitadas aperturas del Gobierno, antes que de lo que activamente promueven sus funcionarios. Las acciones del Gobierno siguen reflejando más que nada las tensiones entre aquellos que consideran las reformas capitalistas como un mal necesario para mantener el control y otros que ven a los mercados como motores de crecimiento imprescindibles para crear un Estado verdaderamente próspero y sostenible.
¿Qué medidas beneficiosas para la población de la Isla han sido puestas en práctica a lo largo de este año?
Varias. La reapertura de la embajada estadounidense ha logrado que nuestros diplomáticos tengan una libertad de movimiento más amplia en Cuba para intercambiar directamente con el pueblo cubano. Los cambios regulatorios que anunció la Administración Obama en enero y septiembre han permitido a un tsunami de estadounidenses viajar a Cuba y apoyar a su sociedad civil, particularmente a un sector creciente de emprendedores independientes, que se ha desarrollado en gran parte gracias a la eliminación de limites en envíos de remesas.
Otra medida que ha beneficiado al pueblo cubano son las aperturas de 50 estaciones públicas de WiFi a través del país, cuyos costos aún son altos, pero también son la mitad de lo que costaba el acceso a internet a principios de año. Todos estos avances son frutos en mano que simplemente no hubiéramos alcanzado bajo nuestra antigua política.
¿Qué puede esperarse a corto plazo de las relaciones entre Cuba y EEUU?
Puede esperarse que la administración de Obama tome medidas adicionales para facilitar el flujo de recursos y contactos entre EEUU y el pueblo cubano, en particular el restablecimiento de vuelos comerciales por primera vez en más de medio siglo.
Avances en temas de migración y reclamos de propiedades a través de las reuniones bilaterales son muy probables. También podemos esperar que aumente el apoyo en el Congreso estadounidense a favor de levantar el embargo, algo que el Gobierno cubano pudiera ayudar a impulsar tomando medidas que hagan más atractiva la inversión en Cuba, como permitir la inversión extranjera en los negocios privados y la contratación directa de empleados cubanos.
Al mismo tiempo, la dinámica actual de América Latina sirve como una llamada de atención a los líderes cubanos de que el momento de tomar medidas audaces hacia la apertura y el desarrollo es ahora. Tienen un gobierno en Washington dispuesto a sentarse incondicionalmente en la mesa con sus contrapartes en La Habana, y nuevos gobiernos en Venezuela y Argentina que se espera intensifiquen su presión para que Cuba avance en su proceso de apertura. Uno solo puede esperar que los funcionarios cubanos aprovechen estas circunstancias para fomentar una mejor perspectiva para sus ciudadanos, incluyendo para los innumerables jóvenes cubanos que siguen huyendo de la Isla en búsqueda de oportunidades y protección que todavía no pueden encontrar en su tierra.
Fuente: Diario de Cuba
