in ,

Cae la producción lechera

leche-cuba-producción.lTomado de ACN

Datos consignados por la Oficina Nacional de Estadística e Información refieren que en el primer semestre del corriente, en relación con igual período del 2014, disminuyó casi un 17 por ciento la producción de leche en el país, debido a la reducción del número de animales en ordeño y un rendimiento promedio de 2,8 litros por animal.

Además, la sequía en más del 70 por ciento del territorio nacional —la más intensa desde 1901— tensa este contexto, con mellas en los planes anuales de territorios como Camagüey, con un peso decisivo en el resultado nacional, Cienfuegos y Guantánamo, por solo citar algunos.

Luces y sombras

En el municipio especial, Aracelys Leyva, al frente de la ganadería, atribuyó el sobrecumplimiento a la venta liberada, sin subsidio y de forma experimental de insumos, equipamientos y servicios especializados, a la compra estatal de la leche a cinco pesos, organización de las bases productivas e incorporación de productores no contratados.

Dania López, jefa de acopio de la Unidad Empresarial de Base láctea Cristóbal Labra en ese territorio, dijo que por este concepto se garantizó el producto fresco a dietas médicas, al consumo social y a los niños durante nueve meses de los cinco planificados, al tiempo que se dejaron de utilizar unas 25 toneladas del alimento en polvo, cuyo precio en el mercado mundial frisa los cuatro mil dólares.

Importante estímulo ha sido para nosotros los pineros el nuevo precio del alimento, aseguró el campesino Normando Rives, reconocido por la calidad y cantidad de la leche que aporta, quien atribuye sus loables resultados además al adecuado manejo de la masa ganadera y la limpieza de los potreros.

En tanto, para Matanzas, Artemisa y Holguín la clave del éxito estuvo en la adecuada alimentación y cuidados veterinarios, el control a la calidad de la leche que se acopia en tanques refrigerados, mejores condiciones para el trabajo y el pago promedio, con bonificaciones por los valores del producto, entre otras acciones.

Paradójicamente, Camagüey, provincia rectora de la producción lechera en Cuba, tiene una compleja situación debido a la deteriorada infraestructura de sus vaquerías, sobre la cual se trabaja en los últimos años.

Gravitan además sobre esa situación las limitaciones subjetivas, relativas a la organización del proceso, manejo de los rebaños y de disciplina contractual.

El campesino Jorge Salas, uno de los más eficientes ganaderos de esa provincia, señaló que existen frenos para mejorar los indicadores del sector, en su caso las empresas estatales no están comprando el excedente de animales porque alegan no tener superficies en condiciones. Por tanto permanecen en las mismas áreas de pastoreo de las fincas de los campesinos.

Elio Pérez, de la Unidad Básica de Producción Cooperativa La Unión en la referida provincia, comentó que los buenos resultados se deben a la estrategia que vincula la obtención de determinado volumen de leche por hectárea, práctica que estimula el acopio del alimento, el cuidado del rebaño, y la observancia de la disciplina laboral y tecnológica.

No obstante, la mayoría de los directivos en los territorios representados en este material, coinciden en señalar como debilidades el insuficiente mejoramiento genético de la masa por el evidente retroceso en el empleo de la inseminación artificial, y las extensas áreas plagadas de marabú y aroma y, en consecuencia, una limitada base nutricional para la alimentación animal.

De dónde venimos y a dónde vamos

Desde 1960 hasta 1989, Cuba desarrolló una ganadería sustentada en el progreso de la ciencia y la técnica, que permitió incluso mejorar la calidad de la masa mediante la selección de embriones.

Los volúmenes de leche tuvieron uno de sus más altos picos en 1989, gracias a una acertada política que aseguraba los insumos para tales resultados. Entonces el sector estatal tenía en sus manos la mayoría del rebaño.

El Período Especial impactó esa realidad. El marabú señoreó en cientos de hectáreas del patrimonio estatal. La pirámide en la tenencia de ganado se invirtió, por lo que el sector cooperativo campesino es responsable ahora de más del 80 % de la producción lechera. El Estado aporta el 12 % del total.

Hace dos años  comenzó a ejecutarse a instancia nacional un programa de desarrollo que prevé la revitalización gradual de ese sector primario de la economía. Esto presupone una millonaria inversión para su materialización, porque es imposible pretender superiores resultados con una infraestructura tan deprimida.

Su modo de concreción en el municipio especial es mediante el Programa de Desarrollo Integral y la venta experimental de insumos agrícolas, equipamientos y servicios, que estimula la cultura de inseminación artificial para el mejoramiento genético a partir de la prestación de ese servicio en los puntos donde se localizan los termos refrigerados.

Asimismo, Aracelys Leyva en el ultramarino territorio comentó que del patrimonio de la empresa, más del 70 por ciento de las tierras están infestadas de marabú, cuya madera se utiliza hoy como postes de cerca y se estimula la producción de carbón, que se cotiza muy bien en el mercado internacional.

Mientras se concretan inversiones por concepto de construcción y adquisición de equipamientos, entre otros, resulta impostergable que los productores garanticen la base alimentaria de los animales a partir de la siembra de pastos, forrajes y proteínas, mejoren la genética, el manejo de la masa y se cumplan los contratos.

Written by ravsberg

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

El Gobierno impulsará el uso de Internet abriendo 80 zonas más de WiFi de pago

VIDEO ¿Cómo piensas despedir el año?