Kendrys Morales se coronó campeón mundial con los Reales de Kansas City en las Grandes Ligas, Urquiola denunció la corrupción en la pelota cubana, y varios futbolistas isleños apostaron al éxodo de Cuba para probar fortuna en el exterior.
El último mes del año 2015, diciembre, nos trae la sorpresa de que algunos peloteros cubanos que juegan en las Grandes Ligas estadounidenses y que abandonaron ilegalmente Cuba regresan a la isla, en lo que ha sido calificado como una misión de buena voluntad para entrenar a niños y realizar trabajos caritativos durante su estadía en La Habana.
Yasiel Puig, jardinero derecho de los Dodgers de Los Ángeles, huyó de Cuba en 2011, y José “Pito” Abreu, 1B de los Medias Blancas de Chicago, en 2013. Como otros cubanos que desertaron fueron calificados en su momento por la prensa oficialista de traidores, y de no haber sido por este acercamiento entre los gobiernos de Barak Obama y Raúl Castro, no habrían podido visitar a sus familiares en la isla hasta que pasaran ocho años de su deserción.
Tras este inusual acontecimiento, más de una persona piensa que es inminente un acuerdo entre MLB y la Federación Cubana de Béisbol que permitiría a peloteros cubanos jugar en la mejor pelota del mundo en Estados Unidos, y después regresar a la isla para participar en la Serie Nacional. Cuba actuaría como intermediario y recibiría su tajada monetaria.
El éxodo de talentos continúa
Este año que se va no fue la excepción, más de cien peloteros cubanos huyeron de la isla en busca del sueño americano, jugar en Grandes Ligas, y el gobierno de Cuba, aunque permitió que algunos jugadores firmaran en ligas extranjeras como la japonesa, la canadiense y hasta la colombiana, no ha logrado parar el éxodo de peloteros.
El reportero del periódico Los Angeles Times, Kevin Baxter, señala que más de 300 peloteros cubanos han escapado de la isla en los últimos 24 años.
En las Mayores, el éxito de los cubanos este año fue tremendo. Dos de ellos estuvieron en la denominada Serie Mundial, el fomentero Kendrys Morales y el granmense Yoenis Céspedes. El primero se coronó campeón debido a que su equipo, los Reales de Kansas City, vencieron a los Mets de Nueva York de Céspedes.
Poco después de concluir el evento, Morales recibió el premio Edgar Martínez, que se entrega al mejor bateador designado en las Grandes Ligas.
Un año empañado por denuncias de corrupción
Una de las noticias que más revuelo causó entre los aficionados al béisbol en la isla este año fue la renuncia del mánager del equipo de Pinar del Río, Alfonso Urquiola, quien dijo públicamente en abril que lo hacía porque hay demasiada “corrupción” e “inmoralidades” en la pelota cubana.
Fuente: MartíNoticias