Diario de Cuba.- Retenida en Cuba durante ocho meses por el intento de realizar su performance El susurro de Tatlin, el 31 de diciembre de 2014, en la Plaza de la Revolución, el régimen la acusó de desacato y le retiró el pasaporte. Más tarde su caso fue sobreseído temporalmente y, tras recuperar su documentación, pudo viajar a EEUU para participar en un proyecto de la Universidad de Yale.
La persecución del régimen contra Bruguera causó impacto en la comunidad artística internacional. Diferentes personalidades y museos internacionales impulsaron manifiestos, recogidas de firmas y organización de performances en espacios emblemáticos tales como Times Square, en Nueva York.
La artista aprovechó los meses en Cuba implicándose en actividades de la oposición interna. Se unió a marchas de las Damas de Blanco y visitó en la cárcel al grafitero Danilo Maldonado “El Sexto”, declarado preso de conciencia por Amnistía Internacional. En mayo fundó en La Habana el Instituto Internacional de Artivismo Hannah Arendt, convocando a una lectura ininterrumpida y discusión colectiva del libro Los orígenes del totalitarismo, de la pensadora alemana de origen judío.