Hoy es festejado en cuba, el Día de la Ciencia Cubana con un programa de actividades centrado en sus aportes al desarrollo social y otros que trascienden fronteras en salud, como el enfrentamiento al ébola y al VIH/sida.
Será una jornada de encuentro de hombres de pensamiento, investigadores, científicos, innovadores y tecnólogos en reconocimiento a su abnegada labor y aportes creativos, señalaron los organizadores en una reciente conferencia de prensa.
Un acto central con motivo de la efeméride se efectuará en el paraninfo de la antigua sede de la Academia de Ciencias en el centro histórico habanero, el mismo sitio donde uno de los más ilustres investigadores, Carlos J Finlay, enunció sus postulados sobre el vector trasmisor de la fiebre amarilla.
Instituida en 1990, la fecha rinde homenaje a una frase del líder de la Revolución cubana, Fidel Castro, quien auguró apenas un año después del triunfo de 1959 que “El futuro de nuestra patria tiene que ser, necesariamente, un futuro de hombres de ciencia, de hombres de pensamiento”.
Desde entonces esta rama ha tenido un desarrollo vertiginoso en Cuba, con disímiles proyectos investigativos encaminados a la preservación medioambiental, mejorar la salud humana y el desarrollo técnico.
En el ámbito sanitario, por solo mencionar algunos ejemplos, hace unos días un equipo multidisciplinario de investigadores anunció el próximo paso en un ensayo clínico que ya presenta resultados alentadores en las primeras etapas de la farmacología experimental.
Se trata de un candidato a fármaco para reducir la talla del infarto de miocardio, seguro y eficaz para revertir esos episodios, explicó Jorge Berlanga, líder del estudio, el mismo en concebir con anterioridad el Heberprot P, el único fármaco mundial diseñado para el tratamiento del pie diabético, con validación en varios países.
El 2015 fue el año además de poner en circulación en el mercado el HeberNasvac, una vacuna terapéutica contra la Hepatitis B crónica, así como el perfeccionamiento del kit diagnóstico Umelisa 170 H Progesterona para el pesquisaje de la hiperplasia suprarrenal congénita.
Los logros de la Ciencia por más de cinco décadas de desarrollo en la salud humana son palpables en la sociedad. En el año recién concluido Cuba se convirtió en el primer país en eliminar la transmisión madre a hijo de VIH-sida y sífilis.
Hecho, en opinión de expertos, que traza la ruta para alcanzar otras metas: buscar generaciones libres de esa enfermedad, que puso en vilo al mundo tras su llegada en la década de los años 80 del pasado siglo y que padecen aún millones de personas en el planeta.
Cuba es ejemplo de cómo se pueden lograr nuevas generaciones sin VIH, afirmó el director ejecutivo de Onusida, Michel Sidibé, quien visitó la isla para conocer de cerca lo que se hace en este campo.
A la par, el nombre de la isla se colocó en lo más alto en otro tema de trascendencia global. Una brigada médica regresó tras varios meses de trabajo en África occidental para poner fin a la epidemia del ébola, que azotaba ese continente desde fines de 2014.
En su bregar solidario, una vez más, Cuba ofrecía sus experiencias en aspectos como el trabajo en zonas de desastres naturales y epidemiológicos, y en misiones de colaboración médica. Destacó Prensa Latina.