Diario de Cuba.- Cuba respaldará a las compañías extranjeras presentes en la Isla ante la entrada de la inversión estadounidense que se espera tras el deshielo diplomático La Habana-Washington y la relajación de algunas restricciones del embargo, según declaró hoy el ministro de Turismo, Manuel Marrero Cruz.
El Gobierno “nunca dará la espalda a todas aquellas empresas que en el momento más difícil apostaron sin miedo por Cuba e invirtieron en el país”, dijo Marrero durante un foro turístico internacional en Madrid.
Los norteamericanos “van a venir, pero bailando la música que nosotros tocamos”, apuntó el ministro, y añadió que el Gobierno está priorizando a las compañías que ya estaban en el país antes, como por ejemplo es el caso de la española Meliá Hotels International.
Su consejero delegado, Gabriel Escarrer, recordó que su compañía lleva 25 años en la Isla, actualmente con 27 establecimientos y cuatro marcas hoteleras.
Por su parte, Marrero precisó que el embargo aún no se ha levantado y que Cuba sigue siendo el único país del mundo al que los ciudadanos estadounidenses tienen prohibido viajar como turistas.
“Hasta que no se levante el bloqueo, no se pueden vender paquetes turísticos al destino”, subrayó Marrero, para quien, tras “la apertura”, pueden llegar a la Isla entre uno y dos millones de turistas estadounidenses en un año, previsiones que “incluso puedan quedarse cortas”, lo que supone “una oportunidad muy grande”.
Ya sólo la noticia sobre el restablecimientos de las relaciones diplomáticas contribuyó a un incremento del 17,5 % en el volumen de turistas internacionales en Cuba, hasta superar los 3,5 millones.
A juicio del ministro de Turismo, Cuba ofrece muchas posibilidades por su corta distancia respecto a Estados Unidos, lo que permite a los americanos visitar la Isla no sólo en vacaciones, sino también en fines de semana.
Marrero ha indicado que los vuelos comerciales entre Estados Unidos y la Isla empezarán a mediados de año y ya se están haciendo planes con empresas estadounidenses interesadas en invertir en el país.
En su opinión, la llegada de los norteamericanos va a ser buena, ya que generará una mayor competitividad, pero “no queremos que vengan a americanizar Cuba sino para disfrutar del país tal y como es”, agregó.
Por su parte, el consejero delegado de Meliá Hotels International indicó que la larga relación de su compañía con el Gobierno se basa en “su plena confianza en la seguridad jurídica del país”, que la ha llevado a “rajatabla”, y en una visión a largo plazo de la compañía.
Escarrer aprovechó su intervención en el foro para pedir al Gobierno cubano que busque “calidad y no tanto cantidad” y que apueste por la formación para contar con los mejores profesionales de cara a la apertura de 24.000 nuevas habitaciones hoteleras, de acuerdo con su plan estratégico 2020.
