El hijo del propietario del aeropuerto de Rancho Boyeros en La Habana, cuyas propiedades fueron confiscadas por la revolución cubana, declaró este martes que si las aerolíneas estadounidenses van a hacer negocios con Cuba a él hay que compensarlo, según publica el diario The New York Times.
José Ramón López, de 62 años, heredero del aeropuerto de La Habana y de la aerolínea nacional de Cuba, Cubana de Aviación, hasta 1959, dijo que se trata de su propiedad. “¿Cómo es que las empresas estadounidenses van a ir allí y beneficiarse de lo que me pertenece?“