México recibió hoy vía aérea dos nuevos grupos de migrantes cubanos en la ciudad fronteriza de Nuevo Laredo (estado de Tamaulipas), por lo que ya son casi 5.000 los isleños llegados tras el acuerdo suscrito con Gobiernos centroamericanos.
En el primer vuelo, proveniente desde Costa Rica, llegaron 118 migrantes, 82 hombres y 36 mujeres, mientras que en el segundo, con el mismo origen, arribaron 124 personas, 89 hombres y 35 mujeres, informó el Instituto Nacional de Migración (INM) en un comunicado.
Todos ellos recibieron por parte de las autoridades migratorias un documento de visitante por razones humanitarias que les permite estar en el país 20 días antes de cruzar a Estados Unidos, especificó la institución.
Con estos dos grupos, el estado de Tamaulipas ha recibido a un total de 3.944 migrantes cubanos procedentes de Costa Rica.
La llegada de dos vuelos directos en el mismo día es una medida “excepcional y limitada” que se puso en marcha el pasado fin de semana, con el fin de agilizar la salida de los cubanos que están varados desde hace varios meses en Centroamérica.
Además, en lo que va de año, otros siete contingentes han llegado a la también fronteriza Ciudad Juárez, en el estado de Chihuahua, provenientes de Panamá.
A esto se le suman otros siete grupos que han entrado vía terrestre por Ciudad Hidalgo, en el sureño estado de Chiapas, procedentes de Costa Rica.
La crisis migratoria comenzó el 15 de noviembre pasado, cuando Nicaragua cerró su frontera a los cubanos aduciendo riesgos para la seguridad y soberanía del país.
Desde entonces, Costa Rica otorgó 7.802 visas temporales a los isleños, pero el 18 de diciembre suspendió la entrega de más de esos documentos, ya que consideró que se había agotado su capacidad para brindarles ayuda humanitaria en albergues.
El paso de cubanos por Centroamérica se intensificó en los últimos meses con el restablecimiento de las relaciones entre EE.UU. y Cuba por el temor a que se elimine la Ley de Ajuste Cubano (1961), que otorga facilidades a los isleños para conseguir la residencia estadounidense. EFE
