CubaNet.- La visita del presidente Barack Obama a Cuba viene despertando gran interés en todas partes. Ya conocéis lo que ocurre en la isla caribeña. De las expectativas, perspectivas, ilusiones, optimismo y escepticismo de los cubanos de allá, ya se ha dicho bastante a través de los medios. De las divergencias tan contradictorias de los cubanos del exilio en los Estados Unidos hay artículos y reportes como para hacer un tratado; pero de lo que opinan otros cubanos que no están ni en la Isla ni en territorio norteamericano, y son tan cubanos como éstos, aún no se ha dicho nada.
Como sabéis los cubanos se encuentran en países tan disímiles como Australia, Alemania, Suecia o Francia; sin embargo las mayores concentraciones, exceptuando a los Estados Unidos, se localizan en España, Italia, México, Canadá y Ecuador, este último país, a pesar de la migración masiva rumbo a Estados Unidos a través de Centroamérica, sigue albergando a centenares de cubanos. Es justamente a algunos de los que viven en este país a los que hemos preguntado su opinión respecto a la visita de Obama a Cuba.
Mi primer entrevistado dice haberse establecido acá hace casi veinte años y hasta ha constituido una familia. Según él: “los dos gobiernos tienen una oportunidad única en la historia de Cuba y EEUU, siempre que exista la voluntad política de ambos, pero el gobierno de cuba, dejando a un lado los compromisos con los que siempre se pronuncia”, e insiste en la idea de que se tenga presente por parte de aquellos que hacen las posibles negociaciones, como es que viven la mayoría de los cubanos. En este sentido precisó: “que también se acuerden de los que tienen que dejar atrás a los hijos y padres para enfrentarse al camino de emigrar, por eso entiendo que es la visita más importante que tendrá Cuba. Estoy más que seguro que el discurso del presidente Obama va hacer muy interesante, que nos hará reflexionar y que nos invitará a todos los que nacimos en Cuba a unirnos, y que pensemos todo lo que hay que cambiar para poder vivir. Tengo mucha fe en que si va a cambiar en muchos aspectos, dándole participación a la sociedad civil dentro y fuera de Cuba”.
Los dos siguientes entrevistados tienen como elementos comunes su profesión y el tiempo de estancia acá. Ambos médicos y con más de dos años en tierras ecuatorianas. “Muy positiva esa visita”, declara uno de ellos. “No porque vaya a llevar a Cuba recursos materiales o monetarios como muchos creen; sino por dejar atrás décadas de enfrentamiento entre dos países vecinos. Siempre digo que hay que tener presente unas palabras de Nelson Mandela: Olvidar y perdonar. Así se construirá un futuro mejor para los dos países. No sin olvidar la historia, pues sin ella no hacemos presente ni construimos futuro”.
El segundo galeno me dejó profundamente impresionado pues se refirió, con conocimiento de causa, a la situación crítica de Cuba, y ante todo, “a la gran desesperanza de los cubanos”. Resume su opinión así: “La mayoría del pueblo cubano tiene esperanzas de que muchas cosas cambiarán y que la situación mejorará en poco tiempo, pero no creo que sea así, teniendo en cuenta el gran deterioro del país en todos los sentidos. Se necesitan muchos años y muy buenas intenciones, sobre todo internas, para lograr algunos avances (…) Todo dependerá de la voluntad de muchos con decisiones importantes en el destino del país, aunque no será necesariamente Obama”.
Alguien muy querido por sus alumnos y que se encuentra ejerciendo el magisterio acá desde hace algunos años, nos dice: “Sé perfectamente que eso no resolverá el más importante problema de los cubanos, el de vivir en una sociedad donde no se respetan sus más elementales derechos humanos. Por lo tanto parecería que al apoyar el encuentro estaría siendo cómplice de ese gobierno, pero no hay de otra, hasta aquí la política existente es fallida y más que benéfica para el gobierno cubano, pues le permite hacer el papel de víctima. Además, cualquier medida que permita aliviar, aunque sea un poco la situación de mis hermanos es bienvenida”. Igualmente insistió en la apertura de Cuba hacia el mundo, en la necesidad de una clase media que emerja desde una eventual reforma económica, así como “ajustar cuentas con quienes se han estado burlando del pueblo cubano a través del tiempo”.
Otros cubanos decididos a quedarse a vivir acá responden con cierto pesimismo; aunque coincidiendo en la idea de cambios a largo plazo: “Si Obama fuera a seguir en el poder, quizás a largo plazo hubiera esperanzas de mejoras, cambios y verdaderas relaciones. Pero como no hay seguridad de nada de eso, pues pienso que es solo política y todo quedará ahí”. El último entrevistado se muestra preocupado por los bajos salarios y la dualidad de moneda, y en este sentido expresó: “Habrá alguna mejoría en las negociaciones; aunque no será de forma inmediata, pero si me gustaría que viera lo real, sé que no será así. Solo me conformaría que mejoraran los sueldos y los precios y que valoraran a los profesionales con una diferenciación en su status laboral”.
Todos los entrevistados viven en Quito, en la zona norte, se han establecido en Ecuador y han logrado permanecer aquí por más de dos años como mínimo, todos son profesionales y se encuentran trabajando, ya sea en el sector estatal o privado. Hay cientos de cubanos en otros sitios de la propia capital o dispersos por todo el país. Esto es solo una pequeña muestra que expresa el sentir de algunos cubanos que ya no están en su patria, pero se siguen sintiendo muy cubanos y con la esperanza de que ocurran verdaderas transformaciones en Cuba. Sin embargo, todos coinciden en la idea de lo positivo que debe ser esta visita para el fortalecimiento de lazos entre ambas partes e intercambios bilaterales, aunque en solo dos días no ocurrirá nada más allá de las buenas intenciones por parte del mandatario norteamericano.
