Hace pocos días se dio a conocer por toda la prensa que 3 peloteros de Industriales habían sido ‘contratados’ para jugar en un liga semindependiente de Canadá, noticia que se recibió con alegría, optimismo y algunas dudas. Hoy las dudas ensombrecen el acuerdo y volvemos a ser testigos de un chiste funesto de la Federación Cubana de beisbol.
Veamos primero la selección de beisbolistas:
Los atletas elegidos son Frank Camilo Morejón, excelente cátcher-bateador por debajo de la media, Ian Rendón, lanzador con serios problemas de control y Noelvis Entenza, de los tres el mejor, pero con par de temporadas recientes muy lejos de la calidad exhibida en un pasado no muy lejano.
Queda claro que no son las primeras figuras de lo que queda en Cuba, aunque Morejón es máscara del equipo nacional.
Veamos entonces a dónde van a jugar:
Con las Panteras de Kitchener, en un torneo netamente en suelo canadiense, que ya se está jugando y dura oficialmente hasta el 31 de julio.
Las Panteras de Kitchener (Kitchener Panthers), es un equipo fundado en 1919, 9 veces campeón de la Intercounty Baseball League (1957 – 1967 – 1968 – 1971 – 1973 – 1990 – 1996 – 1998 – 2000 – 2001) y que juega en el Jack Couch Baseball Park, con una capacidad para 1400 espectadores.
Si, leyeron bien, 1400 espectadores. No falta un cero ni nada…es más…mil cuatrocientos espectadores…para que no haya dudas. O sea un estadio con capacidad similar a cualquiera de los que son considerados ‘de cabecera’ en Cuba.
Ahora, sin embargo, es cuando viene el escándalo, perdón…un nuevo escándalo.
La Intercounty Baseball League (IBL) tiene PROHIBIDO EL PAGO A LOS ATLETAS POR JUGAR EN ESE TORNEO como su regla más importante. (Aquí le estamos compartiendo el link oficial de la liga y además captura de pantalla)
No solo el pago, sino cualquier compensación financiera, efectivo y/o regalos considerables.
De hecho, violar esta regla genera la automática suspensión del pelotero y los encargados del equipo, con posible forfeit de los partidos donde el atleta haya jugado.
¿Entendido? Seguimos.
Los beisbolistas que no sean canadienses (como los 3 nuestros) se les subsidiará por el costo del alojamiento y la dieta alimenticia, esta última nunca superior a 50 dólares diarios.
En fin, que los muchachos van a Canadá por el viaje, por la experiencia y por unos centavos, casi literalmente.
No nos queda de otra que preguntarnos ¿Qué tanto dice la Federación Cubana de beisbol que está ‘trabajando’ para conseguir contratos, cuando en este caso le andan haciendo un favor a una liga semiprofesional canadiense, en vez de conseguir algo sólido y real para nuestros peloteros?
Si Higinio Vélez y pandilla pensó por un minuto que podía engañarnos pretendiendo un contrato donde hay una invitación, les aconsejamos que se replanteen el escenario, pues de beisbol internacional está difícil hacernos un cuento, por la sencilla razón que toda la información está al alcance de un ‘clic con el mouse’ y no escondida, como acostumbran en Cuba.
Resumiendo otro fiasco en la imagen pública de los representantes de la pelota en la isla. Esperemos que los muchachos disfruten el paseo, hagan un buen trabajo y alguna liga de importancia se fije en ellos para que tengan la remuneración que merezcan.
