Caterpillar Inc, está lista para entrar rápido al mercado cubano. El mayor fabricante de maquinaria pesada solo espera el fin del embargo comercial de Estados Unidos, para posicionarse en el mercado cubanos según afirmara su presidente ejecutivo, Doug Oberhelman, después de reunirse con ministros de la isla en La Habana.
El restablecimiento de relaciones diplomáticas entre Cuba y los Estados Unidos ha reavivado el interés de grandes empresas en participar en la incipiente y virgen economía cubana.
Numerosos representantes de empresas y Cámaras de comercio son visita frecuente en La Habana. Cuba ha promulgado una Ley de Inversión Extranjera que regula las formas de participación del capital foráneo en la Isla.
“Hemos hablado sobre varios proyectos”, dijo el ejecutivo a periodistas al margen de un evento para celebrar una donación de la compañía a la fundación que preserva el legado del escritor estadounidense Ernest Hemingway en Cuba.
“Creo que el más interesante en el corto plazo sería el puerto de Mariel (…) hacer un puerto moderno y eficiente que compita con otros de todo el mundo”, agregó.
Cuba está apostando gran parte de su futuro económico al puerto de Mariel, al oeste de La Habana y que es visto como un potencial centro de distribución para el Caribe, América Central y Sudamérica.
Caterpillar ya nombró a un concesionario oficial para Cuba, la firma privada puertorriqueña Rimco, que está dialogando con las autoridades de Estados Unidos para obtener una licencia que le permita vender ciertos productos de la compañía a pesar del embargo comercial de Washington.
Cuando se le preguntó en qué momento espera que se levante el embargo, Oberhelman dijo: “La respuesta es no muy pronto (…) La idea es que nuestro concesionario abra una instalación en Cuba (…) Nosotros suministraríamos la mayoría de nuestros productos desde Brasil”.
Con información de agencias.
