El Hotel Carrión es una infraestructura utilizada por las autoridades ecuatorianas para albergar a los extranjeros que están a la espera de ser deportados.
Sin la posibilidad de una defensa, Yunier Leyva, es acusado por funcionarios de ese país de haber cometido un delito menor, por tal motivo es un huésped más de este hotel y que pronto será deportado a Cuba.
“Yo estuve en una misión en Venezuela, estuve con el partido de Cuba hasta el 2015 y desde entonces me transforme en disidente para buscar una mejor vida”, dijo a gritos el cubano pues no le fue permitido conceder una entrevista.
Leyva se le acusa de haber comprado una moto robada, misma que no tenía idea de su procedencia. Junto a él se encuentran otros inmigrantes de otros países quienes están en las mismas condiciones.
“Yo no quiero volver a Cuba”, decía entre gritos el inmigrantes pues volver allí significaría pasar precariedades.
El joven indicó que era militante de la UNPACU y primo hermano de uno de sus activistas, sin embargo su familiar demitió tal versión y expresó que solo utiliza a la organización como una excusa para poder entrar más fácilmente a los Estados Unidos.
