Entre dictadores se entienden y pareciera ser el régimen cubano el incondicional aliado de la dictadura de Corea del Norte, dirigida por Kim Jong Un, amistad que se remonta al año 1945.
Reseña Cubanet, que “los mensajes intercambiados mediante enviados especiales bajo pretextos públicos de informarse sobre los resultados de los respectivos congresos partidistas probablemente esconden la intermediación por Cuba para acceso de Pyongyang a los mercados y tecnologías internacionales que le están vedados, y en eventuales negociaciones con terceros países a fin de torear al impetuoso Líder Supremo, tan entusiasta por el rock n’ roll como por los “rockets”.
Este nexo se estrella contra una pared de la nueva fachada internacional que busca impulsar el régimen de Castro, quien se muestra como mediador, pacifista y totalmente abierto al diálogo.
Raúl Castro continúa estrechando las relaciones con Kim Jong-un, nieto de Kim Il-Sung e hijo de Kim Jong-il, heredero de la dinastía de la República Democrática Popular de Corea (Norte) desde el 7 febrero 2011. El joven, nacido posiblemente el 8 de enero de 1988, no poseía historia militar ni política, pero el temprano fallecimiento de su padre lo catapultó.
Desde entonces ha consolidado su poder y escalado las tensiones en la península compartida con la República de Corea (Sur).
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A fines de mayo, el general-presidente recibió al general Kim Yong-chol, miembro del Buró Político del Partido de los Trabajadores de Corea (PTC), reportado por agencias de prensa como jefe de la Oficina General de Reconocimiento (encargada de operaciones clandestinas), y muy próximo Kim Jong-un, acompañado por José Ramón Machado Ventura, segundo secretario del PCC, Salvador Valdés Mesa, miembro del Buró Político, y José Ramón Balaguer, Jefe del Departamento de Relaciones Internacionales del PCC.
El 30 de junio, el líder supremo Kim Jong-un recibió a Salvador Valdés Mesa aproximadamente una hora, según reportó el periódico Granma.
Estos intercambios denotan continuidad de los mensajes entre los máximos dirigentes de ambos países. En mayo de 2015, Raúl Castro acogió a Kang Sok-su, miembro del Buró Político del Comité Central del PTC y secretario de Relaciones Internacionales.
En septiembre, el primer vicepresidente Miguel Díaz Canel viajó a Pyongyang con motivo del 55 aniversario del establecimiento de las relaciones bilaterales y fue recibido por Kim Jong-un; también se reunió con el primer ministro Pak Bong-ju y el vicepresidente de la Asamblea Popular Suprema, Yang Hyong Sop, en Pyongyang.
En octubre, Salvador Valdés Mesa participó en las celebraciones por el aniversario 70 de la fundación del PTC.
Un suceso que acaparó atención internacional fue la detención en 2014 del barco Chong Chon-gang en el Canal de Panamá procedente de Cuba, con un cargamento de 240 toneladas de “la mayor cantidad de armamento y materiales relacionados” interceptada ya sea yendo con rumbo a Corea del Norte o saliendo de ella, desde que fuera impuesto un embargo de armas en el 2006 a causa de su programa nuclear, según el informe sobre la investigación encargada a la ONU.
El gobierno cubano adujo que se trataba de armamentos y equipos obsoletos.
Relaciones peligrosas
En octubre de 2006, el gobierno norcoreano detonó su primera bomba nuclear y probó el misil de largo alcance Taepodong-2, que Estados Unidos considera falló poco después del despegue. Pero lanzamientos posteriores de cohetes de largo alcance han sido exitosos, y en enero de 2016 explotó una bomba de nitrógeno.
Las “conversaciones a seis bandas” de Corea del Sur, Estados Unidos, Rusia, Japón, China y Corea del Norte comenzaron a fines de 2006, y se alcanzó un acuerdo con pasos para la desnuclearización a cambio de ayuda energética y compensaciones económicas, en febrero de 2007.
Por entonces, volvía a ocurrir una gran crisis alimentaria, que Estados Unidos y otros países contribuyeron a mitigar como gesto humanitario debido a los millones de coreanos que han muerto por hambrunas en diversas épocas.
Sin embargo, la tensión en la zona se incrementa por las actividades de Pyongyang, que China no ha podido controlar a pesar de su cercanía.
En marzo de 2016, el Consejo de Seguridad de la ONU impuso nuevas sanciones económicas tras la cuarta prueba nuclear y el lanzamiento de cohetes de largo alcance.
Por otra parte, a principios de mayo las cámaras de comercio de Corea del Sur y Cuba firmaron un acuerdo para sentar las bases de la cooperación económica bilateral, un paso de avance para la normalización de las relaciones entre los gobiernos, suspendidas desde que se establecieron las relaciones diplomáticas con la RDPC.
Un viceministro de Asuntos Exteriores de Seúl visitó la Isla por primera vez, en el marco de la representación de su país como observador en la Cumbre de la Asociación de Estados del Caribe.
Los máximos dirigentes de La Habana y Pyongyang continuarán enviándose altos emisarios para conciliábulos azarosos. Ambas Coreas seguirán intercambiando disparos, Panmunjom aguardará el acuerdo de fin de la guerra (1950-1953) y los pueblos del norte y el sur esperarán la reunificación.
Publicado originalmente en Cubanet
