El presidente de Estados Unidos, Barack Obama exhrtó “a todas las partes” en Turquía para que “apoyen al gobierno elegido democráticamente, muestren contención y eviten cualquier violencia o baño de sangre”.
El secretario de Estado de EEUU, John Kerry, que se mantiene en contacto con Obama, ha hablado con el ministro de Exteriores turco, Mevlut Cavusoglu, para “poner énfasis en el absoluto apoyo a las instituciones democráticas y el gobierno democráticamente elegido” de ese país.
Obama mantiene una buena relación personal con Erdogan, a pesar de la deriva autoritaria de éste. Turquia es un aliado clave para EEUU, no solo por su pertenencia a la OTAN, sino también por su papel en la guerra de Siria e Irak.
Estados Unidos usa bases turcas para bombardear al Estado Islámico en esos dos países, y también entrega a través de territorio turco armas a la oposición moderada al régimen de Bachir Asad en Siria. No obstante, en EE.UU. muchos acusan a Ankara de estar crecientemente bajo la influencia de los islamistas, y a Erdogan, en concreto, de minar las instituciones democráticas del país. Turquía es también el mayor aliado en la región de Israel.
Con información de Reporte 24