Un bombero voluntario es considerado como héroe luego de detener a un adolescente que disparó a tres personas en una escuela primaria en Carolina del Sur tras haber dado fin a la vida de su padre en su casa.
El joven hirió a dos estudiantes y a una profesora ayer miércoles por la tarde en los espacios exteriores de la escuela primaria Townville, pero fue detenido antes de que pudiera entrar al edificio por el bombero Jamie Brock, un veterano de 30 años del servicio de bomberos voluntarios de Townville, que afortunadamente estaba en la misma calle de la escuela.
Scott Stoller, del servicio de emergencias aseguró que “el bombero Brock es desde luego un héroe”.
Los disparos iniciaron en la casa del adolescente, a unos tres kilómetros de la escuela, donde asesinó a su padre, Jeffrey Osborne, de 47 años. Las autoridades no han informado el nombre del sospechoso ni su edad.
El adolescente, muy afectado y enojado, llamó al teléfono celular de su abuela a las 13:44, declaró Greg Shore, forense del condado Anderson. Los abuelos no lograron entender qué estaba sucediendo, así que acudieron a su casa, a tan sólo 91 metros de distancia. Cuando llegaron hallaron a Osborne baleado y entendieron de que su nieto ya no estaba allí.
Luego de un minuto, ya se encontraba en la escuela de la población rural, ubicada a unos 176 kilómetros al nordeste de Atlanta.
Llegó allí conduciendo una camioneta y tan pronto la estacionó comenzó a disparar al salir del vehículo y dirigirse hacia las instalaciones, afirmó Skipper.
Uno de los estudiantes heridos recibió un balazo en una pierna y el otro en un pie, informó el capitán Garland Major, de la policía del condado Anderson. Por su parte, la maestra fue herida en un hombro.
“Estamos desolados por este acto de violencia sin sentido”, lamentó Joanne Avery, supervisora del 4to distrito escolar del condado Anderson. La funcionaria canceló las clases por el resto de la semana.
Con información de Agencia AP
