El municipio San Antonio del Sur de Guantánamo, fue otro de los golpeados fuertemente por el huracán Matthew. Ríos de barro y escombros recorrieron sus calles mientras que la lluvia y los fuertes vientos destrozaron los techos de las casas y empresas que allí se encuentran apostadas.
Sus pobladores están incomunicados, la carretera que conecta con otras zona de la provincia colapsaron y la red eléctrica sufrió daños considerables.
Tampoco hay comunicaciones telefónicas fijas o móviles, ni señales de radio y televisión, luego de que se dañara un kilómetro del cable de fibra óptica que pasa por el lugar, una pérdida que afectó por igual a otros municipios, reseña el diario Venceremos.
El Bate Bate, una vía asfaltada costera de siete kilómetros por la que hay que pasar para llegar desde la cabecera provincial a Imías y Baracoa, prácticamente desapareció, y ahora es un pedraplén escabroso y cubierto de cascotes de asfalto.
La crecida del río Sabanalamar cerró el paso por carreteras, y las lluvias y los vientos afectaron la agricultura, incluidos cientos de miles de matas de plátano y millones de posturas de tomate.
Afortunadamente no se han reportado pérdidas de vidas gracias a las evacuaciones, con la particularidad de que la mayoría de los evacuados, unas siete mil familias, se refugiaron donde amigos y familiares.
Con información de Venceremos
