Este jueves le fue concedida al peligroso narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán, la extradición según informó a fiscalía general de México, aunque esto no significará su traslado inmediato hacia Estados Unidos, esperando la apelación de los abogados de Guzmán.
La decisión llega tras el asesinato del juez Vicente Bermúdez de 37 años, mientas trotaba en plena calle, por un sicario que le disparó a la cabeza.
El Gobierno mexicano decidió en mayo extraditar a Guzmán a pedido de una corte de Texas, donde se le acusa de asociación delictiva, narcotráfico, delincuencia organizada, posesión de armas, homicidio y lavado de dinero; y una corte de California, que lo requiere por asociación para importar y poseer cocaína con la intención de distribuirla.
“El Chapo”, que actualmente se encuentra bajo régimen de total aislamiento en una prisión de máxima seguridad en la norteña Ciudad Juárez, fronteriza con Estados Unidos, sólo tiene permitido contacto ocasional con sus familiares y abogados.
Mente criminal en problemas
El Chapo Guzmán ha testificado para peritos en informes médicos realizados que se siente “mal” y sufre severa pérdida de memoria.
“Me siento mal del cerebro. Se me están olvidando las cosas. Para ir al baño a bañarme se me olvida la toalla. Me acuerdo de muchas cosas pasadas, pero no de las recientes, a veces no recuerdo qué comí ayer”, le dijo a los médicos.
Sus abogados han solicitado que se le permitiera estar en contacto con otros presos, alegando que el aislamiento le provoca angustia y estrés, pero las autoridades mexicanas no han cedido.
Con información de Agencias
