El crimen de Chester y Sandra Bienek se registró la mañana de este domingo en su residencia de Beach City, Texas pero los cuerpos fueron encontrados el día el martes. Cada uno de los fallecidos presentaba un disparo en la parte posterior de la cabeza.
El joven cusado, quien es estudiante de la secundaria Middle School South en el distrito escolar de Barbers Hill, está en custodia en un centro de detención juvenil del condado Hardin.
Según las declaraciones de Brian Hawthorne, alguacil del condado Chambers, el crimen de la señora y el señor Bienek sucedió la mañana del pasado domingo, cuando cada víctima recibió un disparo en la parte trasera de la cabeza.
El nieto de los fallecidos no fue a estudiar el lunes ni el martes por lo cual el personal de la escuela trató de entrar en contacto con la familia vía telefónica. Al no lograr respuesta, la directora del plantel y un oficial del distrito escolar de Barbers Hill se presentaron en la vivienda del estudiante.
El adolescente abrió la puerta al personal de la escuela y afirmó que no había asistido a clases porque estaba enfermo. Al momento que la directora le pide hablar con sus abuelos, el joven aseguró que ellos no estaban porque habían salido de compras.
La directora no hizo más preguntas al joven y le solicitó que le informara a sus abuelos que contactaran a la escuela tan pronto como regresaran de sus compras.
La familia Bienek nunca llamó al centro educativo, por lo cual la directora optó por llamar al número del abuelo. Tal parece, que el joven respondió al teléfono e intentó hacerse pasar por el señor Bienek. La funcionaria inmediatamente se percató que se trataba del adolescente y fue entonces cuando el chico comenzó a llorar y afirmó que su abuela estaba ensangrentada.
Con información de Univisión