La decisión de incorporar a países como Cuba, China y Arabia Saudita al Consejo de Derechos Humanos de la ONU no fue bien recibida por la congresista republicana Ileana Ros-Lehtinen quien además expresó que era lamentable que Estados Unidos continúe en esa agrupación, porque el proceso debía condenarse con la no participación de la potencia mundial en el bloque.
“Deberíamos estar lamentando que Estados Unidos es nuevamente un miembro del Consejo de Derechos Humanos, no celebrando”
Para Lehtinen, Estados Unidos debió condenar la participación de países con historiales recientes de violaciones de derechos humanos, decidiendo no ser partícipe de la agrupación que en teoría, debería proteger las libertades fundamentales.
“Cuando países con historiales de abusos a los derechos humanos como Cuba, China y Arabia Saudita son reelegidos a reincorporarse con otros abusadores de los derechos humanos como Venezuela, Vietnam y Burundi en el Consejo de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas, el proceso debe ser condenado, no legitimado con nuestra participación”
La congresista además aseguró que lejos de proteger los derechos humanos, el organismo se convirtió en un mecanismo que brinda protección a países violadores de derechos humanos y que la posición de Estados Unidos, en pro de la democracia debía haber retirado el aporte financiero y su total participación en el organismo.
“En vez de ser un organismo para promover y proteger los derechos humanos, el Consejo ha sido usado como una herramienta para proteger los peores abusadores de derechos humanos en todo el mundo de escrutinio y se ha vuelto una plataforma usada para deslegitimar el Estado Democrático Judío de Israel. Nuestros intereses hubieran sido mejor representados si hubiéramos retenido nuestro aporte financiero y participación para exigir reformas drásticas en el Consejo en vez de ser cómplice en la agenda absurda de la organización.”
