El Tribunal Supremo de Estados Unidos informó este viernes que tomará una decisión sobre si los estudiantes transexuales de una escuela pueden acceder a los baños que coinciden con su identidad de género en lugar de con su sexo biológico, un tema que genera cada vez más polémica en los Estados Unidos.
El caso que estudiará la máxima corte estadounidense se genera de una demanda de un condado de Virginia, pero está relacionada directamente con una medida que impuso este año el gobierno de Barack Obama, en la que le pide a todas las escuelas públicas del país que permitan a los estudiantes transgénero elegir el baño que desearan usar.
El Tribunal Supremo estadounidense, que en el año 2015 legalizó el matrimonio homosexual en todo el país, no había emitido declaración sobre los derechos de los transexuales hasta aceptar este caso, sobre el que se estima que decida en junio de 2017 y que será seguramente uno de los más importantes de su próximo mandato.
La petición aceptada por la corte proviene del distrito escolar del condado de Gloucester en Virginia, que en el mes de agosto apeló el fallo de un tribunal inferior que permitía a un estudiante que nació con el sexo femenino hacer uso de los baños masculinos durante su último año en la institución escolar.
El joven en cuestión tiene por nombre Gavin Grimm, de 17 años, que se identifica como hombre y que pudo usar los baños masculinos durante algunas semanas en el año 2014, hasta que algunos padres del instituto se quejaron y la junta escolar se inclinó por la política que obligaba a usar los aseos que coincidían con su sexo biológico.
“Me siento humillado cada vez que necesito usar el servicio”
Aseguró Grimm el jueves en el diario The Washington Post, donde relató su decisión de denunciar a la junta escolar cuando le negaron usar los baños para hombres. A lo cual agregó:
“(Los transexuales) no somos perversos. No estamos enfermos. No somos raros. No podemos cambiar quiénes somos. Nuestra identidad de género es tan innata como la de los demás. Espero que los jueces del Supremo puedan verme a mí y al resto de la comunidad transgénero por lo que somos, simplemente personas”
Finalmente la demanda original de Grimm fue secundada en abril por un tribunal de apelaciones de Virginia, basándose en parte en la interpretación del gobierno de Obama del Título IX, una ley de 1972 que prohíbe la discriminación “sobre la base del sexo” en las escuelas que reciben fondos federales.
Un mes después de la decisión de dicho tribunal, el gobierno de Obama emitió una directiva por la que las escuelas públicas de todo el país pueden perder los fondos federales si no ejecutan la norma de que, cuando un estudiante o sus padres notifiquen un cambio de género del alumno, la institución debe respetar esa nueva identidad.
El argumento por la parte federal es que la palabra “sexo” en debates sobre cuestiones de discriminación también cobija la “identidad de género”, y defiende que los centros educativos que reciben fondos federales no pueden discriminar por razones de sexo.
Con información de EFE.