La expectativa crece por la carrera a la Casa Blanca, mientras el FBI declaró el domingo que mantiene su recomendación de no presentar cargos criminales contra Hillary Clinton por emplear un servidor privado para enviar correos electrónicos cuando cumplía labores como secretaria de Estado, aclarando una nube de críticas y cuestionamientos contra su campaña a sólo horas de la elección presidencial en los Estados Unidos.
En una carta al Congreso, el director del FBI, James Comey, afirmó que la agencia completó su revisión de los nuevos emails luego de trabajar “contrarreloj”. A lo cual completó:
“No hemos cambiado las conclusiones que expresamos en julio”
Hace un poco más de una semana, Comey notificó al Congreso de los nuevos correos electrónicos, causando más turbulencia en la ya áspera carrera entre Clinton y Donald Trump por alcanzar la vitoria y con ella, la llegada a la Casa Blanca.
En el mes de julio, el FBI había dicho que “ningún fiscal razonable” presentaría cargos contra Clinton por el uso de un servidor privado. En ese momento, Comey reafirmó que la pesquisa halló pruebas de un manejo extremadamente descuidado de los emails de la exsecretaria de Estado y que no menos de 110 comunicaciones contenían información clasificada.
“Estamos contentos de que este asunto se haya resuelto, pero para que quede claro, esto podría haber quedado zanjado después de que se envió la primera carta”, aclaró en Twitter Brian Fallon, portavoz de Clinton.
Por su parte, los republicanos, sostuvieron las críticas. “Ella cree que está sobre la ley y juega bajo sus propias reglas”, expresó en un comunicado el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, quien resaltó que el uso de Clinton de un servidor privado “comprometió nuestra seguridad nacional”.
Luego de conocer la decisión del FBI, Trump dijo que no es posible “revisar 650.000 correos en ocho días”
En una actividad en Michigan, Trump dijo que la investigación sobre los correos electrónicos de su rival demócrata “no va a desaparecer”, e invitó acudir a las urnas el próximo martes para acabar, según sus palabras, con “un sistema que protege a Clinton, nos roba los trabajos y los manda a México”.
Clinton “es culpable, ella lo sabe y el FBI también”, resaltó Trump en Michigan, uno de los estados más reñidos en la recta final de la lucha por la presidencia.
El revuelo de los correos electrónicos hizo que Trump redujera la amplia diferencia que le llevaba Clinton en el desarrollo de la campaña.
Con información de Agencias.
