El 11 de noviembre es el Día de los Veteranos, por tal motivo están programados desfiles, ceremonias y variados homenajes en todo Estados Unidos en honor a todos aquellos quienes prestaron y prestan servicio en sus fuerzas militares.
Como es habitual cada año, el anfiteatro conmemorativo construido en torno a la Tumba del Soldado Desconocido, en el cementerio de Arlington, a las afueras de Washington, será el punto central en las ceremonias dedicadas al Día de los Veteranos.
La tradición está firmemente establecida: una guardia combinada de los distintos cuerpos representando a todos los servicios militares, realizan la “presentación de armas” frente a la tumba. Posteriormente, el Presidente deposita una corona y seguidamente un corneta realiza un característico toque propio de los entierros militares en Estados Unidos.
Para rendir homenaje a los 16 millones de estadounidenses que lucharon en la Segunda Guerra Mundial (incluyendo los 407.000 que murieron), y a otros que honorablemente prestaron servicio al país en cualquiera de sus guerras, en el año 1954 el Congreso y el presidente Dwight Eisenhower nombraron el 11 de noviembre como “Día de los Veteranos”.
“Redediquémonos a la tarea de promover la paz duradera de manera que todos sus esfuerzos no hayan sido en vano”
Afirmó el presidente Eisenhower en su proclama del primer Día de los Veteranos.
Aunque originalmente fue llamado Día del Armisticio en conmemoración del aniversario de la firma del armisticio que puso punto final a la Primera Guerra Mundial.
Los restaurantes y tiendas en todo Estados Unidos brindan descuentos especiales este día a los veteranos y al personal activo de las fuerzas armadas.
Con información de Terra