Como si se tratara de una herencia, Nicolás Maduro y Diosdado Cabello, se repartieron Venezuela mitad y mitad tras la muerte de Hugo Chávez Frías, según el sobrino de Cilia Flores, Efraín Campo Flores, quien está siendo enjuiciado en Estados Unidos por narcotráfico.
A Diosdado Cabello le quedaron los ingresos fiscales, la minería y los alimentos. A Nicolás Maduro, le quedó nada más y nada menos que el petróleo, principal fuente de ingresos del país.
El testimonio de Flores explica el grueso de poder que logró acumular Cabello, quien además está presuntamente vinculado al “Cartel de los Soles” y ha sido solicitado por la justicia estadounidense.
Según el “narcosobrino” también se utilizaron fondos del narcotráfico para el financiamiento de campañas electorales del chavismo, así como el uso arbitrario del sistema judicial con el fin de encarcelar a todo aquel que les resultara incómodos dentro de Venezuela.
La “repartición de bienes” se hizo como especie de pacto “a puertas cerradas”, donde Cabello delimitó qué podría quedarle a cada quien quedándose entonces con los impuestos, la minería y los dólares preferenciales para la importación de alimentos.
“Entonces -que en paz descanse- Chávez muere. Y entonces esto quedó en manos de él, y entonces el petróleo quedó en manos de nosotros.”
El arreglo perjudicó a los “narcosobrinos”. “Nosotros trabajábamos con oro, con cemento, con hierro y eso nos los quitamos pero para nosotros es, es un conflicto de poder”. Además Campo confesó que es Diosdado Cabello quien controla los puertos y aeropuertos de Venezuela.
Escasez y desabastecimiento: el negocio redondo
El gobierno de Hugo Chávez Frías impuso desde sus comienzos un control cambiario que terminó convirtiéndose en el conflicto económico más grande a superar en un país que dejó de producir practicamente todo.
El “negocio redondo” lo han manejado personeros del gobierno recibiendo dólares preferenciales para rubros esenciales.
Tal y como reseña El Nuevo Herald “el tipo de cambio oficial para las importaciones prioritarias actualmente tiene una tasa preferencial de 10 bolívares por dólar, frente a la tasa paralela que el jueves fluctuaba por encima de 4,600 bolívares por dólar”
Con información de: El Nuevo Herald
