Dicen que cada quien recibe lo que merece, y eso fue exactamente lo que estos cubanos quisieron hacer con las “cenizas” del “comandante” Fidel Castro, a quien le rindieron honores al mejor estilo de los exiliados.
Dentro de una lata de carne rusa, estos ocurrentes isleños decidieron sepultar los restos del dictador, pero no cómo lo hicieron en la Cuba comunista. Utilizando guardia de honor, los restos de “el comandante” fueron llevados hasta el baño, para que encontrara el descanso eterno.
“Esto está podrido, estas cenizas están podridas”
Es así como estos exiliados cubanos demuestran sus “respetos” por el extinto dictador, quien falleció el pasado 25 de noviembre.