La gigante piedra en la que fue enterrado el ex dictador cubano, Fidel Castro, pesa dos toneladas, es de granito pulido, y fue traída desde los márgenes del Río Cauto, también hay califas moradas provenientes de la Sierra Maestra.
Sin duda, el mítico lugar donde está ubicado el monolítico, el Cementerio de Santa Ifigenia, se ha constituido en un lugar de atracción para propios y extraños. Los visitantes han hecho fila toda la semana para echar un vistazo a la piedra, en cuyo interior se guardan los restos de Fidel.
El fenómeno ha sido instantáneo, atrayendo tanto a cubanos como a extranjeros curiosos. La gente empezó a hacer fila junto a los portones cerrados del Cementerio de Santa Ifigenia. Cuando los guardias abrieron los portones en la tarde del domingo y se les permitió entrar organizadamente, varios de ellos dejaron una sola rosa o un ramo de flores al pie de la austera tumba.
Con información de nuevoherald