“¿Y ahora quién podrá defendernos?”. Las expectativas de salir de la isla y poder ir halando de uno en uno a sus familiares y allegados se vinieron al suelo para los cubanos en Estados Unidos tras la decisión de Barack Obama de anular la política de Pies Secos, Pies Mojados.
Para Obama esta resolución sirve para tratar a los migrantes cubanos “de la misma manera que tratamos a migrantes de otros países”. La deportación ahora es una posibilidad para los cubanos que lleguen al país potencia.
Sobre la postura de Donald Trump, aún se desconoce si afianzará la decisión o será un faro de luz para quienes continúan a medio camino del sueño americano. Sin embargo, en el año pasado había considerado “injusto” que algunos inmigrantes pudieran entrar al país legalmente, mientras los de otros países no podían hacerlo.
“Yo conozco a muchos cubanos en los Estados Unidos que están muy nerviosos por el cambio porque crea una nueva serie de dificultades para aquellos que se quieren ir de Cuba”, declaró a PERFIL Peter Hakim, presidente emérito de Inter-American Dialogue, un centro estadounidense que se enfoca en análisis de política en el hemisferio occidental.
“Me parece un paso lógico, porque ya no se podía justificar igualmente el tratamiento especial a los inmigrantes cubanos”, agregó.
Redacción Cubanos por el Mundo / Con información de Perfil
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