El ajo con miel resultó ser un súper alimento que tomado en ayunas sirve para curar heridas, aliviar la tos y alejar las infecciones.
El ajo ha sido alimento y medicina durante miles de años.Muchas de las recetas del antiguo Egipto lo incluyen para el tratamiento de dolencias, infecciones y la debilidad física.
Los antiguos griegos lo utilizaron libremente, y los atletas en los Juegos Olímpicos comieron ajo para mejorar su rendimiento. Los romanos lo dieron a los soldados y trabajadores.
Pero no se limita a Europa. Los médicos de Ayurvedic, en la India, lo prescriben para enfermedades del corazón y para prevenir el reumatismo.
En Japón y China desde tiempos antiguos era un remedio para controlar la presión arterial alta.
Gran parte de sus virtudes se le atribuyen a su aporte de alicina, un compuesto activo que favorece el control del colesterol alto, la presión arterial y otras afecciones del sistema cardiovascular.
También se utiliza como tratamiento para los problemas digestivos, las afecciones respiratorias y los hongos.
Debido a sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, se distingue como un gran complemento contra la artritis, el cáncer y la diabetes.
Todos los síntomas de la gripe y el resfriado se pueden controlar de forma temporal con el consumo constante de este tratamiento.
Sus propiedades eliminan los virus y estimulan la actividad de los anticuerpos que se encargan de proteger las vías respiratorias.
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Redacción Cubanos por el mundo/ Con información de mejorconsalud.com