La derogación de la política Pies secos, Pies mojados por parte del presidente de EEUU, Barack Obama, le complicó la vida a miles de familias cubanas, en virtud de que algunos de sus parientes se encontraban en tránsito hacia el país norteño al momento de activarse la medida, que fue inmediata.
Treinta y seis horas permanecieron los familiares esperando por ver qué sucedería con sus parientes retenidos en el centro de inmigración.
La alegría manifestada por los familiares, tras la liberación de sus allegados y parientes, es simplemente indescriptible, no tienen palabras cómo expresar sus emociones ante los momentos empañados por la angustia y la incertidumbre que vivieron minuto a minuto.
Una señora de 73 años de edad fue liberada y manifestó haber sido bien tratada. Desde que arribó al aeropuerto de Miami, la mantuvieron sentada, gestionando papeles y le manifestaron que un juez de inmigración la iba a atender. Durmieron en el piso. Entre las mujeres se encontraba una venezolana y una italiana, a quienes se agregaban cuatro hombres.
La señora cubana recomienda entrar como turista y no manifestar que se van a acoger a esta política ni al asilo político. Más bien, acogerse a la Ley de Ajuste Cubano y esperar un año más un día para gestionar la residencia en EEUU.