Engañados. Así se siente un grupo de cubanos detenidos en Panamá, quienes confiaron en funcionarios de migración panameños para pedir orientación de su situación migratoria y terminaron en una cárcel.
Desde su celda, estos cubanos grabaron un video denunciando los maltratos a los que fueron sometidos.
Ellos se encontraban en camino a los Estados Unidos cuando fueron sorprendidos por la terminación de la política Pies Secos/Pies Mojados. Decidieron entonces regresar a Ciudad de Panamá para buscar un salvoconducto y poder transitar por el país tranquilamente.
Pero el llegar a las oficinas de migración se consiguieron con algo totalmente diferente.
Los funcionarios se les abalanzaron y esposaron. Con golpes y empujones los metieron en una celda.
Luego les prometieron que serían trasladados a un albergue donde tendrían comida y buenas condiciones, pero fue otro engaño más.
En el “albergue” las condiciones son deplorables. Las paredes sucias y húmedas, los pisos rotos y poco higiénicos.
“Esto de albergue no tiene nada. Nos tratan como unos presos, nos vigilan todo el tiempo”.
“Pedimos continuar”
Su exigencia es simple, quieren continuar su viaje, pero la burocracia panameña se los impide.
Mientras, piden a los funcionarios el grupo sea llevado a uno de los albergues dispuestos por la fundación Cáritas Panamá, donde las condiciones son mejores.
Ellos se encuentran esperanzados que el nuevo presidente, Donald Trump, reactive los beneficios migratorios.
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“Todos saben la situación que se vive en Cuba, es un sistema opresor, nosotros no queremos ser deportados y necesitamos un abogado para que se haga una evaluación de nuestra situación”
Redacción Cubanos por el Mundo
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