Para los 90 migrantes cubanos detenidos en la Estación Migratoria Siglo XXI, en Tapachula, el sueño americano se ha convertido en una pesadilla signada por las extorsiones y desapariciones que pareciera no tener fin.
Buscando llegar a Estados Unidos terminaron quedando varados en México tras el fin de la política de pies secos/pies mojados. Emprendieron protestas dentro del recinto carcelario pero han sido apagadas. ¿Su petición? Ver la luz de la libertad que buscaban cuando salieron de Cuba en medio de condiciones infrahumanas en las que se encuentran.
Reseña El Nuevo Herald, el testimonio de una madre cubana, varada en esta prisión migratoria, cuyos familiares han sido víctimas de la extorsión.
“Durante semanas nos ha estado llamando una persona para pedirnos dinero si queremos ver nuevamente a nuestros familiares” expresó.
Otra madre denunció que desde el pasado 29 de diciembre su hijo fue apresado en Tapachula, México y ha quedado como un gran grupo de cubanos “del otro lado del charco” sin poder entrar a Estados Unidos por la eliminación de la política de pies secos/ pies mojados, anunciada por Barack Obama el pasado 12 de enero.
La experiencia de esta mujer, radicada en Miami, expone el cuadro de extorsión que ha envuelto el caso de estos migrantes. Media hora después de recibir una llamada de su hijo desde la Estación Migratoria, un sujeto identificado como “abogado Padilla” habló con ella, llamada procedente de México.
“Intentaba averiguar el nombre de nuestros familiares y nos decía que podía ayudarnos a sacarlos de allí a cambio de una suma de dinero”, cuenta.
Los migrantes han denunciado que se tratarían de las propias autoridades del Instituto Nacional de Migración quienes estarían prestándose para extorsionar a los familiares de los privados de libertad.
“Todos sabemos que los funcionarios de migración tienen alguna manera de conocer los números a los que se llama en Estados Unidos. De alguna forma, ellos averiguan los números y después aprovechan para extorsionar a la familia”, comenta.
Según reporta El Nuevo Herald, al menos tres familiares de distintos migrantes han confirmado haber recibido llamadas de supuestos financieros tranzando la libertad de los cubanos a cambio de grandes cantidades de dinero.
“Tememos por su suerte, están en manos de mafiosos. La semana pasada se ‘desaparecieron’ de la misma prisión tres cubanos. Hasta hoy nadie sabe nada de ellos”, afirma la madre del migrante cubano.
Del grupo de 90 cubanos en la Estación Migratoria Siglo XXI, 59 han solicitado amparo ante un juez y 23 solicitaron refugio a las autoridades de México. Los ocho restantes esperan la decisión de la embajada cubana, de ser reconocidos como ciudadanos cubanos serán deportados.
Razón de la protesta
Durante la semana pasada, el grupo de “Los Camagüey” como se han referido a los migrantes cubanos en la prisión migratoria, inició una protesta exigiendo se develara el paradero de tres cubanos desaparecidos dentro de las celdas: Armando Daniel Tejeda, Daniel Benet Báez y Yosvany Leyva Velázquez.
“Los golpearon, les quitaron las cobijas y los colchones, obligándolos a dormir en literas de cemento. Los vigilan y los mantienen presos como si fueran delincuentes”, denunció la madre de uno de los migrantes consultada por el Herald.
“Mi hijo puede desaparecer, como mismo han desaparecido esos”, agrega.
Sin embargo, una funcionaria del departamento migratorio, aseguró que se habría tratado de una fuga, por lo que no le darían el tratamiento de desaparecidos, aunque los familiares desconozcan el paradero de estos isleños.
“Dos de ellos habían solicitado refugio y uno tenía previsto el juicio de amparo. Ambos se fugaron y se dio parte a las instancias correspondientes”, agregó la funcionaria.
Redacción Cubanos por el Mundo / Con información de El Nuevo Herald