La desesperación muchas veces motiva a la gente a atentar en contra de su vida como única manera de solucionar los problemas. Tal es el caso de estas dos cubanas, quienes al no recibir respuesta de las autoridades panameñas sobre su solicitud de asilo político, decidieron cada una tomarse 25 pastillas de un antialérgico.
Las cubanas que se encontraban en el albergue ubicado en la zona del Darién, tuvieron que ser sacadas de emergencia y trasladadas a un hospital cercano donde fueron atendidas. Se supo que su condición es grave.
“Estamos aquí muy preocupados porque dos compañeras de nosotros acaban de atentar contra su vida y les suplicamos que nos den respuestas porque ya estamos cansados de estas condiciones”, dice una vocera del gran grupo de cubanos
Estas mujeres realizaron la acción suicida el pasado 17 de febrero pero fueron descubiertas a tiempo por los militares.
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“Nosotros sólo queremos pedirle al presidente Varela que nos ayude, que nosotros no podemos reguresar a nuestros país por problemas políticos, si regresamos estamos dispuestos a que nos maltraten”.
Las dos cubanas integran un grupo de 72 migrantes que solicitaron asilo al gobierno de Panamá, ya que aseguran no poder regresar a la Isla y que al menos los envíen a mejores condiciones mientras esperan.
En el albergue improvisado, los caribeños no cuentan con las condiciones mínimas necesarias para poder convivir. No tienen agua potable, ni para bañarse y la comida escasea.
Redacción Cubanos por el Mundo
