La llegada de jóvenes en bikinis de lechuga a La Habana, levantó criticas de quienes apuestan por soluciones viables a la aguda crisis que azota a los cubanos desde hace varias décadas.
Para el periodista Juan Juan Almeida, la iniciativa de PETA (Personas por un Trato Ético a los Animales), de promover la ingesta de vegetales en vez de carne de res, más allá de calar en la sociedad cubana que carece de todo, es una apuesta “absurda” para promover una cultura que ha sido prácticamente impuesta por el régimen mediante sus innumerables controles.
Otra disparatada iniciativa…un tin pintoresca, quizás interesante, pero totalmente absurda. Representantes de PETA arriban a la terminal aérea José Martí de La Habana con la expresa intención de combatir el abuso animal y crear hábitos vegetarianos en la isla
Para el desarrollo de su artículo, el periodista refleja ocho verdades que se viven en Cuba y que quizás refleja el poco conocimiento que tiene la organización con la realidad país.
La idea de ver activistas jóvenes vestidas con hojas de lechuga sobre bikinis verdes, resulta una forma atractiva de llamar la atención; y sorprende por el enorme desconocimiento que muchos tienen de la historia, la política, la cultura, las leyes y la sociedad cubana.
Para comenzar su enumeración de verdades, Almeida hace hincapié en una prohibición muy conocida por los cubanos, la de transitar por las calles con escasa ropa.
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Existe, y es bueno saber, una disposición provincial, que alerta, y dice más o menos así: quien circule o se disponga a callejear en traje de baño por la capital cubana, aún cuando todos sabemos que es una ciudad costera, incurre en contravención y podría ser multado.
Sin embargo, asegura que esto podría ser una “consideración” del régimen en su intento por seguir agradando a la diplomacia estadounidense.
Con respecto a al centro de la iniciativa, la de evitar comer carne de res, el periodista resalta la orden del 12 de julio de 1963.
fecha de creación de las tristemente célebres OFICODAS (Oficinas de Control y Distribución de Alimentos), los cubanos se han visto forzados a cambiar carne por pollo, por fricandel y/o pescado, dependiendo de la tanda de abastecimiento en la libreta de racionamiento.
En su afán por revelar la inusual y nada planeada campaña de PETA en Cuba, Almeida continúa su lista.
- En la mayor de Las Antillas se come tanta carne de res como en la India, donde las vacas son sagradas, es decir muy poca o nada.
- Cuba es la única isla del mundo que en su dieta no figura el pescado,
- Los cubanos nacidos en tiempos del eufemismo llamado “Período Especial” (5) crecieron sin la cultura de comer carne de res
- hoy una libra de vegetales, en el mercado agropecuario, compite en precio con la de carne de cerdo. Sería útil saber quién ofrecerá lechugas a estas bellas jovenzuelas porque, aún cuando el general Raúl Castro en el año 2008 entregó, el régimen de usufructo, 1,7 millones de hectáreas.
- Cuba continúa importando más del 63% de los alimentos que consume.
- la lechuga fresca que se ofrece en los restaurantes de los hoteles para turistas no se cultiva en la isla.
Para este especialista en el tema cubano, PETA sólo busca el bullicio de haber esta en la Isla comunista.
El principal enemigo de quienes pierden el tiempo creando iniciativas que solo persiguen bullicio, es el sentido común. Ya es tiempo de impulso, determinación, y de concientizar sobre temas reales, como el pertubador aumento del índice delictivo, el abuso de género, y los innumerables casos de violencia doméstica. Por solo citar lo más notable.
Redacción Cubanos por el Mundo / Periodista Juan Juan Almeida – Martí Noticias