Hoy se celebra el Día Mundial del Agua, un líquido vital para todas las expresiones de vida sobre la Tierra, sin embargo, para los cubanos el agua potable luce cada vez más lejana.
De hecho, hasta hace solo unos meses, una cubana reveló “aquí en santiago de Cuba, todo el mundo está sucio, no hay agua, yo no sé como en la plaza dijeron ¡1ro de mayo, Viva! todo el mundo lo dijo”, y es que la escasez del agua en las ciudades cubanas es cada vez más frecuente.
En tanto otro cubano dijo:
la culpa es del gobierno, que viven proclamando que aquí en Cuba hay igualdad, pero a ellos no les falta el agua, porque tienen cisternas y gas, y el pueblo pasando necesidades
Y es que generalmente, mientras el gobierno alerta sobre la grave situación de sequía en la nación caribeña, nunca se sugiere el aplazamiento de los “planes de desarrollo” que comprometen grandes volúmenes de agua.
Siempre el régimen acota que el pueblo debe racionar el agua y promueve “crear conciencia” en las personas sobre la “necesidad del ahorro”, pero ¿cuál agua ahorrarán los cubanos? si por las tuberías lo que escasea es precisamente, el agua.
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Y como suele acontecer, en la televisión nacional, las noticias sobre la crisis del agua en la isla guardan silencio y se limitan a señalar a la población como agente de los males y a demonizar a algunos negocios, la mayoría en manos del sector privado, como los de lavado de autos y la renta de viviendas con piscinas, pero de la responsabilidad del Estado, no se habla.
Y cuando el agua potable hace su aparición por las tuberías, aquello dan ganas de llorar de tan solo ver el nivel de contaminación del vital líquido, un agua que ni siquiera sirve para el aseo personal, porque ¿quien se puede bañar con un agua marrón y a simple vista, contaminada?
Una cubana que vive en un poblado lejano a la ciudad, aseguró que desde el año 1993 que vive en el sector “nunca ha llegado el agua potable”, tal como se puede evidenciar en el video que se muestra a continuación.
Son situaciones que muestran cómo en el último bienio, el régimen cubano ha sometido al pueblo a una verdadera angustia y desesperación con relación al abastecimiento del vital líquido.
En las provincias del oriente del país, la situación llega a límites verdaderamente preocupantes, de hecho, el diario oficialista La Demajagua refiere que la sequía ha generado impactos en la seguridad alimentaria y la nutrición en esta zona y en adelante, durante la Convención Internacional Cubagua 2017, se mencionó que están laborando en 20 municipios de la región oriental de la Isla, con el apoyo de entidades oficiales de los sectores agrícola, medioambiental, de recursos hidráulicos, meteorología y la defensa civil para superar el problema, que a la fecha sigue mermando la calidad de vida de los cubanos.
Dentro de las principales repercusiones por la falta de agua en la Isla se ubican la
reducción en la producción agrícola, la inestabilidad de suministros, la pérdida de ganado y el consiguiente debilitamiento de la nutrición, a la vez que implica una mayor importación de alimentos y con esto, un monto superior en la carga presupuestaria por ese concepto.
Redacción CPEM
