https://www.facebook.com/yusnaby/videos/1411367948938307/
Cristofer es un niño de apenas 7 años de edad que hoy lucha en la cama de un hospital habanero contra un inusual cáncer estomacal que amenaza con robarle su alegría.
Desesperados, familiares tanto en Cuba como en Estados Unidos, piden al gobierno una visa humanitaria para que el menor reciba el tratamiento necesario, pues en la Isla, supuestamente la cuna de la medicina según el régimen, no cuentan con lo necesario para curar su enfermedad.
Una nota del periodista cubano Yusnaby pérez, revela que los especialistas le diagnosticaron un tumor abdominal de unos 20 centímetros, llamado también linfoma de Burkitt, una especie de cáncer poco común. Los galenos cubanos probaron con varios medicamentos pero no mejora.
Jessica Suárez, tía de Cristofer, está desesperada. Ella pide a los políticos cubanoamericanos de la Florida, ayuda para poder trasladar al niño y de esa manera salvar su vida.
“Quiero pedirle a los congresista, a los senadores, a todo el mundo, que me ayuden a salvar la vida del niño”.
Especialistas estadounidenses, afirman que la enfermedad es curable si se trata a tiempo y se le aplican unas drogas específicas.
La doctora Beatriz Amendola, es una especialista que lleva más de 30 años tratando a personas con cáncer en los Estados Unidos, y sus análisis llena de esperanza a los familiares.
“Es una enfermedad que si se trata a tiempo se puede curar, particularmente con drogas de quimioterapia que son muy activas”.
Ella asegura que luego del tratamiento, si el niño queda libre de cáncer, tiene que ser sometido a un trasplante de médula ósea.
RECOMENDADO: “Tienes que esperar que se muera alguien para que te den algún aparato médico”; la realidad de los hospitales cubanos
No se rinde
Mientras su tía en Miami hace todo lo posible para obtener la ayuda necesaria, el pequeño le envía un mensaje que la conmueve y llena de fuerza para seguir luchando.
“Sólo quiero decirle que quiero que este al lado mio, que la quiero mucho”, dice el pequeño en un video desde la cama del hospital
Rendirse no es una opción para los familiares de Cristofer, es por eso que apelará a todas las instancias hasta logra que el niño sea traído a los Estados Unidos.
“No queremos que le pase nada malo, sabemos que aquí, en este país se puede salvar”.
La comunidad cubanoamericana en Miami y otras ciudades de Estados Unidos, están al pendiente del caso para que la niña de ese pequeño niño no sea consumida por la maligna enfermedad.
Redacción Cubanos por el mundo
