Nadie supo los motivos de su cierre ni de su apertura, el todo es que ayer martes la popular tienda habanera conocida como la Plaza de Carlos III, que se mantuvo cerrada desde el pasado viernes, reabrió sus puertas y comenzó a funcionar normalmente.
No obstante, lo único evidente, fue la amabilidad de los empleados y la presencia de jabitas y el menudo para dar el vuelto.
Quienes pensaron que en esta oportunidad se encontrarían con tiendas más surtidas, simplemente se equivocaron. Nada más lejano de la realidad en el céntrico edificio, situado en la avenida Salvador Allende.
A lo interno del lugar se podía ver a los niños jugando en la zonas de parques infantiles, y a los padres consumiendo una que otra bebida y algo de aperitivo.
En tanto, en las afueras del lugar solo se observaron a los agentes de la seguridad multando a quienes estacionaban mal o en sitios indebidos sus vehículos, pero de los revendedores nadie dijo nada, desaparecieron del sitio.
Redacción CPEM | Con información de 14 y medio