Con el calor y al son de la música cubana, un grupo de estudiantes de la Escuela Nacional de Arte, La Habana, puso hoy a bailar a la ciudad francesa de Enghien-les-Bains, localidad balnearia aledaña a París.
Durante su presentación, los jóvenes sorprendieron con una actuación de elevadísimo nivel artístico y animada por el ritmo propio de los músicos cubanos. La audiencia que se encontraba reunida en el Centro de Artes del centro urbano -incluida en la lista de villas creativas de la Unesco- deliró de alegría y satisfacción ante el espectáculo musical que ofrecieron los estudiantes provenientes de la nación caribeña.
La actuación estuvo enmarcada en las celebraciones de la Semana cubana en Francia, que tienen lugar actualmente en la sede de la Unesco en París y en varias instituciones de la ciudad de Enghien-les-Bains.
Las actividades desarrolladas marcarán el inicio oficial de la cooperación entre el Ministerio de Cultura de la nación caribeña y Enghien-les-Bains.
Según señaló el el viceministro de la Cultura, Abel Acosta, las autoridades de la ciudad francesa promueven desde hace muchos años la cultura cubana a través de diversas actividades conjuntas, pero el concierto de este viernes dio comienzo formal a la cooperación.
En el marco del intercambio cultural tuvo lugar un donativo de instrumentos musicales por parte de Francia, mientras los representantes cubanos regalaron a los anfitriones un conjunto de tambores batá y enviarán a un profesor para enseñar cómo tocarlos a estudiantes franceses de música.
De igual manera se prevé, consolidar un proyecto de cooperación para coproducir un material audiovisual sobre la historia del cabaret Tropicana, y se acordó que la Semana cubana correspondiente al próximo año estará dedicada a la oriental ciudad de Santiago de Cuba.
Para clausurar estas actividades, Vitier ofrecerá un concierto en Enghien-les-Bains, acompañado por el grupo Quarteto y la soprano Barbara Llanes.
Redacción CPEM | Con información de prensalatina