En su intento por hacerle frente a la crisis hídrica que azota a la Isla, el régimen cubano se propone a implantar multas de hasta mil pesos, a aquellos que “derrochen” el agua.
De acuerdo con un reportaje de la agencia de noticias EFE, cerca de 870 multas fueron impuestas sólo en La Habana durante el primer trimestre del año, como mecanismo de combatir las fugas del vital líquido.
En estos momentos, en que Cuba enfrenta su peor sequía del siglo, el régimen intenta combatirla creando conciencia con fuertes multas. Sin embargo acciones concretas, como establecer plantas desalinizadoras, no están en los planes de Castro.
Manuel Manso, director de atención a la población de la empresa suministradora “Aguas de La Habana”, explicó que un cuerpo de inspectores, integrado por 108 trabajadores, ha permitido actuar de manera más directa con los consumidores en los barrios de la capital.
Manso indicó que primeramente los inspectores tienen la obligación de conversar con la persona que incurre en la violación, y solo después imponer las multas, en dependencia de la gravedad de la indisciplina cometida, según cita la estatal Agencia Cubana de Noticias.
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La crítica situación hidrológica afecta a Cuba desde el año 2014 a causa de la intensa sequía, señaló el reporte.
El país llegó a ese momento con escasa preparación. El propio Gobierno ha reconocido que más del 50% del agua que se bombeaba en la Isla años atrás se perdía en salideros debido al mal estado de la red de distribución, que no recibió inversiones ni reparaciones durante décadas.
Según el delegado del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos en La Habana, Javier Toledo, el impacto de la sequía en la capital cubana se ha reducido en los últimos meses tras la ejecución de una serie de medidas, a las que se refirió en una comparecencia televisiva dedicada a analizar el problema de la sequía.
Entre las medidas mencionó la eliminación de la pérdida de 1.500 millones de litros de agua con la rehabilitación de las redes de distribución y las conductoras, muy antiguas y deficientes.
El funcionario dijo que se han invertido más de 225 millones de pesos cubanos (equivalentes a unos nueve millones de dólares) para rehabilitar 748,6 kilómetros de redes hidráulicas en La Habana, donde hay ocho sistemas interconectados que proporcionan agua al 90% de la ciudad. En algunas zonas el agua se suministra a diario y otras en días alternos.
Redacción Cubanos por el Mundo / Con información de EFE