Un centro de cuidado adscrito al Ministerio de Salud cubano se encuentra en el último estado de abandono, se trata del hospicio La Edad de Oro, dedicado a la atención de personas con discapacidad psíquica y física.
Ubicado en la Calzada del Cerro No. 1352 esquina a Saravia, La Habana, se encuentran en este centro 200 pacientes encefalopáticos, algunos con retraso mental. Hay ocho niños entre 7 y 15 años; diez adultos mayores de 60 y los demás tienen entre 40 y 50 años. Sólo diez pacientes caminan y comen sin ayuda. De ellos, 50 pueden relacionarse.
Según revela María Victoria Olavarrieta a través del portal de noticias 14ymedio, las personas que trabajan en el lugar son de pocos recursos “muy pobres” y agrega que es una de las pocas instituciones estatales donde el Gobierno ha permitido la presencia de religiosas.
Según relata Olavarrieta:
Mi primer encuentro con los niños de este hogar fue en 1991 en un festival que Sor Marta Calvo, la hermana sirviente (así le llaman a la superiora Las Hijas de la Caridad) me pidió que ayudara a organizar en el Hogar de Ancianos de Paula para invitar a los niños de La Edad de Oro. A todos los pacientes les llaman “niños” sin tener en cuenta la edad que tengan
Y recordó la oportunidad en la que el papa Francisco visitó Cuba, particularmente el momento cuando una de las monjas dirigía sus palabras en la Catedral de La Habana en 2015, sin mencionar las duras condiciones por las que atraviesa este centro de atención médico y psicopedagógico. Al respecto, Olavarrieta indicó que se perdía una oportunidad para señalar que en La Edad de Oro, los pacientes se encuentran en estado realmente crítico.
CONDICIONES EN LAS QUE SE ENCUENTRAN LOS PACIENTES DE LA EDAD DE ORO
Dentro de las carencias señaladas por Olavarrieta se ubica que los niños duermen sin pañales y prácticamente, desnudos; la mayoría de los enfermos están desnutridos; no se les puede llevar regalos porque todo se lo roban.
Adicionalmente, no hay suficiente personal paramédico para cargar, bañar y alimentar a los enfermos, mientras la necesidad de cargadores es urgente, y es que las monjas ya no pueden más, porque hay pacientes que, por su elevado peso y condiciones, son muy difíciles de mover, puntualiza Olavarrieta.
La infraestructura del lugar, también se encuentra deficiente, de hecho, el edificio no tiene elevador para trasladar a los enfermos. Mientras, el régimen castrocomunista “nunca ha aceptado dejar la administración en manos de Las Hijas de la Caridad, a pesar de todas las veces que ellas lo han pedido”.
La situación comentada y detallamente explicada por Olavarrieta, no dista en mucho de la expuesta por Martinoticias durante el 2015, cuando compartió un video en referencia a esta situación, varios años han pasado y, tal como se evidencia, no hay mejoría. No es del interés del régimen ocuparse de estos asuntos que rayan en lo inhumano.
No obstante, Olavarrieta, hace un llamado desde Miami y convoca a quienes viajen a Cuba, a considerar su apoyo y ayuda para La Edad de Oro, así lo puntualizó:
Ahora que tanta gente está yendo a Cuba les propongo a los turistas que visitan La Habana hacer una obra de caridad. No se vayan de la Isla sin llevar unos pañales a los niños de La Edad de Oro, Calzada del Cerro # 1352, por favor. Muñecos de peluche y zapatos plásticos serían muy bien acogidos también
Redacción CPEM | Con información de 14ymedio y martinoticias