Un fondo de donaciones que recién empieza ha recibido un millón de dólares por parte del cubano y magnate, Mike Fernández, para ayudar a los inmigrantes indocumentados ante la política de deportación de extranjeros promovida por Donald Trump.
“Se ha comprobado que los que van a la corte con representación legal tienen muchas opciones de recibir protección, mientras que los que no llevan abogado posiblemente serán deportados”, relató Fernández al diario El País.
La fundación Impac Fund la anunció el mismo empresario a principios de este mes. Su capital servirá para financiar los servicios de abogacía a los extranjeros sin papeles detenidos, a través de las ONG Chatolic Legal Services –de la iglesia Católica– y American For Inmigration Justice –laica–.
El cubanoamericano partió de la Isla en 1959, a tan solo siete años de haber nacido en Manzanillo, llegó a México antes de establecerse en Nueva York, donde realizó sus estudios y trabajó en simultáneo.
“Por eso no puedo quedarme callado. Los inmigrantes de ahora no son diferentes a mí”, declaró desde su despacho en Coral Gables de su firma MBF Healthcare Partners.
Según la publicación Mike Fernández espera que se recauden entre cinco y diez millones, para lograrlo cuenta con el apoyo de figuras como el actor de origen cubano, Andy García, el exgobernador de Florida, Jeb Bush o Magic Johnson.
“No es un problema exclusivo de Derechos Humanos, también es un problema para la economía. ¿Cómo se puede ser tan ignorante como para querer expulsar a 11 millones de inmigrantes? Nadie querrá hacer sus trabajos. Y además de a los que limpian cuartos o jardines, estaremos echando, por ejemplo, a nuestros futuros doctores, que son sus hijos”.
En relación al presidente Donald Trump, con quien compartió un almuerzo, contó que le incomodó el maltrato que dio a un camarero hispano.
“Se lo comenté y me respondió: ‘Trabaja para mí’. Y yo dije: ‘Pues que tenga una buena comida’. Me levanté de la mesa y me fui. Es el hijo de un rico. Si se hubiera tenido que sacrificar como hace un inmigrante para tener éxito en su país no actuaría como actúa”.
Para el cubanoamericano el presidente no es un gran empresario, a su juicio. “Con el dinero que le dio su padre hasta un necio hace fortuna en el negocio de los viene raíces en Nueva York. Pero todo lo que ha tocado fuera de ese sector le ha explotado al pobre hombre. Es extremadamente débil. Si fuera tan fuerte no hubiera quebrado tantos negocios. Yo no contrataría ni para pintarme la casa”.
Aunque asegura no tener miedo al presidente, “mis amigos me dicen que estoy jugando con fuego y que me puedo quemar (…) A veces pienso que me subirá a un avión y me mandará de vuelta. Bien. Si es así, que me deje ir en mi avión privado”.
Mike Fernández es uno de los cubanos más influyentes que respaldaron el enfoque de acercamiento a La Habana, que realizó el entonces presidente Barack Obama, e incluso lo acompañó en su visita oficial a la Cuba el pasado año, pero con Trump cree que esas relaciones van a empeorar. “Pienso que en el próximo mes le va a dar marcha atrás a muchos avances que se hicieron con Obama”.
Redacción CPEM / Con información de El País